Y después de este interesante entrante llegaba el momento esperado pero no imaginado por todo el mundo, la presentación del mejor piloto de todos los tiempos, Toni Bou, que nada más empezar dejaba a todo el mundo sin palabras con una exhibición donde lo más dificil lo convertía en un espectáculo fácil y perfecto para la vista del espectador que no sabía que lo mejor estaba aún por llegar.
Llegaba el plato fuerte del día donde Toni Bou y el ganador del trial Pol Tarrés se disponían a hacer el intento de Record Guinness de subir una pared vertical, donde tenían que intentar superar la altura de 3,22 metros que hasta el momento estaba en manos de Jordi Pascuet y Marcel Justribó desde el año 2009.
Controlado en todo momento por la notario Maria Oswalda Pérez para comprobar que todas las medidas estaban correctas y certificando en todo momento que todo lo que estaba sucediendo era cierto, se empezaba la ascensión a una altura de 2,75 metros que los dos superaron.
