Entrevista a Ciriac Grados

Todo campeón tiene un comienzo. Un lugar y un momento en donde forja el carácter y las habilidades que le harán prevalecer cuando llegue la hora de la verdad. Pues bien, ese lugar, esa fragua en la que se moldean los Toni Bou y Laia Sanz del mañana, se enclava desde hace más de un lustro en la barcelonesa Santa Margarida de Montbui. Su Hefesto: Ciriac Grados.

 «La ECT está abierta a todos»

En Castellolí y Sigüenza, las dos primeras pruebas del Campeonato de España de Trial al aire libre, brillaron con luz propia varios pilotos surgidos de la Escuela Catalana de Trial. Aprovechando su presencia en la cita manchega, como representante de la RFME, conversamos tranquila y pausadamente con el impulsor y alma mater de la ECT: Ciriac Grados.

– Supongo que ver a vuestros ex alumnos en posiciones destacadas es más que un motivo de orgullo y satisfacción.
– Sí, es cierto que el ver a jóvenes pilotos como Miki (Gelabert), Arnau (Farré), Marc (Riba), Venanci (Vidal), Aniol (Gelabert) o Mireia (Conde), por nombrar algunos de los que han pasado por la Escuela, me llena muchísimo de satisfacción. Independientemente de la excelente progresión que como pilotos de trial están teniendo, lo que más me enorgullece de ellos es que su personalidad no ha cambiado; siguen siendo humildes y sencillos, y si en este aspecto la Escuela ha tenido algo que ver me compensa todo lo demás.

– Muchos os consideran legado inequívoco del trabajo realizado en el pasado por Ricard Pinet y Vera Siebken, y el Motor Club 80.
– Ricard y Vera, para mí, son irrepetibles, y mi trabajo en la Escuela jamás se acercará al que ellos realizaron en su día. Para mí, eran únicos. Yo, simplemente, soy un aficionado al Trial .

– Del campeonato impulsado por ambos surgieron nombres como Laia Sanz o Josep Manzano, por ejemplo.
– Indudablemente. Cuantos más niños tienes, más posibilidades tienes de que alguno llegué a lo más alto. Pero en el caso de Laia… tiene algo que la hace especial, y esto no se enseña en las escuelas; se lleva dentro. Y eso los hace diferentes a los demás .

– ¿Cómo surgió la idea de crear la ECT?
– Cuando en 2005 decidimos fundar la Escuela Catalana de Trial, ya llevabamos 5 años haciendo cursillos por Navidad, Semana Santa y Verano, y los sábados solía entrenar a algún que otro niño en el Área de Santa Margarida de Montbui. Muchos de los padres, que traían a sus hijos a los cursillos, empezaron a venir con sus hijos los sábados, con lo cual teníamos que regularizar estas actividades porque se nos estaba desbordando. Y no era lo que quería. Tal cantidad de niños, no se ajustaba a mí idea de Escuela. Yo he tenido desde el principio una forma de trabajar con ellos y quería mantenerla. Mi máxima, desde que empecé, era que, por la mañana, llegaran con una sonrisa y se marcharan al acabar con la misma o más grande; quería que los niños se lo pasaran bien y disfrutasen. Junto con la Federación Catalana de Motociclismo, a la cual agradezco todo su apoyo, entendíamos que para ir aportando participantes al Campeonato de Cataluña de Niños sería interesante crear una Escuela, con el fin de que los más pequeños empezarán a tomar contacto con el trial de competición.

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– ¿Quién puede tomar parte en ella?

– Todo aficionado que quiera iniciarse en el trial, ya sea a nivel de competición o como hobby.

– Mireia Conde, Campeona de España en Féminas A 2013, te echa una mano desde hace unas temporadas como monitora.
– Sí, Mireia me ayuda mucho como monitora, pero no porque sea Campeona de España, sino porque ella sabe perfectamente cuál es mi sistema de trabajo y lo que yo exijo a mis monitores para el trato con los niños. Esto es una Escuela y no un negocio. Aquí no hay diferencias. Todos los niños son iguales. Unos con unas características y otros con otras, pero iguales. Y esto ella lo tiene muy claro.

– Bueno, y algún que otro padre también os ayuda.
– El hecho de tener a los padres con nosotros durante los entrenamientos es un aspecto muy favorable. Ellos nos ayudan en sitios con cierto riesgo. Además, creo que es bueno que también colaboren, porque de este modo ellos también se adaptan al sistema de entrenamiento que les damos a sus hijos. Hemos de pensar que, a posteriori, ellos son los que les hacen de mochileros en las carreras y es importante que evolucionen junto al niño o niña.

– Los padres, madres y parientes de los chicos y chicas que tenéis como alumnos son también una parte muy importante de la ECT, ¿cierto?
– Es interesante que en la Escuela se respire un buen ambiente y esto lo logramos con una cierta complicidad entre las familias. Y el hecho de reunir algunos sábados a los padres y madres contribuye a ello.

– Uno de los principales valores de la ECT es que no sólo formáis pilotos; también formáis personas.
– Enseñar a un niño o niña a ir en moto es una tarea con más o menos dificultad. A unos les es más fácil y a otros les cuesta más. Pero educarlos y formarlos como personas es mucho más complicado, y es terrero de los padres. Nosotros, realmente, no podemos involucrarnos en demasía, pero sí aportar una serie de normas y valores, como son el respeto hacía los demás, el compañerismo, la solidaridad e ilusión… Sin esto, la Escuela no funcionaria y yo no me sentiría satisfecho con mi labor.

– ¿Qué han de hacer los interesados en tomar parte en vuestras clases?
– De entrada tener ilusión para empezar a practicar trial y, posteriormente, ponerse en contacto con la Escuela, donde le daremos toda la información que necesite. La ECT está abierta a todos.

– ¿Con un casco y una moto basta o hay que tener también licencia?
El primer paso es tener la licencia federativa, moto , casco, botas, espaldera y paro de seguridad. Actualmente, estamos en conversaciones con una marca de motos eléctricas con el fin de incorporar a niños y niñas de menor edad y con motos más asequibles.

– También formas parte de la Comisión de Trial de la RFME. ¿Cómo ves el Campeonato de España?
– Dadas las circunstancias y en los momentos que estamos atravesando, mantener el número de inscritos que estamos teniendo estos dos últimos años creo que demuestra la buena salud del Campeonato de España.

– En Castellolí, contasteis con un centenar de pilotos. Y eso que no estaban los TR1.
– Como presidente del club organizador, es indudable que esta cifra de inscritos nos sorprendió y enorgulleció. Era la primera prueba al natural de la temporada y a ella asistieron muchos participantes de Cataluña; muchos de ellos, por desgracia, no habituales del Campeonato de España.

– ¿Por qué la RFME mantiene el STOP y no adopta el NON STOP como el Campeonato del Mundo?
– A día de hoy, aún no entiendo por qué la FIM decidió cambiar el reglamento. Tengo entendido que gracias a esto se han vendido muchísimas más motos, los paddocks del Mundial se han llenado con 150 participantes y, además, los pilotos se lo han pasado ¡¡muy bien !! El trial, como todos los deportes, ha evolucionado tanto a nivel técnico (motos) como de pilotaje, y no se puede coartar esta progresión, porque a una serie de señores que son los que marcan las directrices de un deporte sean un grupo de nostálgicos que piensen que el pasado fue mejor.

Este nuevo reglamento no ha abierto las puertas a nuevos participantes en el Mundial. Pienso que el reglamento STOP, tal y como se aplica en el Campeonato de España, se adapta mucho mejor al pilotaje actual. Es mucho más simple y se le otorga mucho menos protagonismo al Juez de Zona. Para mí, el Non Stop es un fracaso.

Toni Bou se ha proclamado Campeón del Mundo Indoor por octava vez. ¿Puedes avanzarnos algo sobre el Campeonato de España de Trial Indoor 2014? Todavía no hay calendario al respecto y Octagon ya no será su promotor.
– Se está trabajando para crear un CETI destinado a la participación de pilotos jóvenes, que creo debe ser la base para en un futuro tener un grupo que pueda relevar con garantías al plantel actual. Hay que darles la oportunidad de poder alcanzar un alto nivel, y esto únicamente se consigue mediante la participación en carreras de este tipo.