Entrevista a Gabriel Marcelli

A pesar de que descubrió el trial por casualidad, Gabriel Marcelli, de sólo 16 años, es uno de nuestros jóvenes con mayor proyección de futuro. De formación autodidacta, en apenas un lustro ha pasado de entrenarse en solitario en O Rosal a ser piloto de deseo de las principales marcas del paddock.

 «En 2017 haré el Mundial o parte del mismo, alguna del Europeo y el Nacional de TR2»

Lo llaman ‘el nuevo Casales’, el piloto gallego más destacado de la actualidad. Marcelli no esconde su admiración por el Campeón del Mundo Júnior de 2013, y actual número 1 de Beta Factory, ni sus deseos de compartir equipo con él en un futuro. Pero mientras eso llega, sus estudios, sus entrenamientos y algún que otro ‘trameado’ por las empinadas cuestas de su localidad natal son quienes copan por el momento sus pensamientos y tiempo.

– Lo primero, Ha pasado un año y medio desde tu grave accidente, ¿cómo te encuentras?

– Bien. Me estoy recuperando de un pequeño esguince que me hice en mi regreso al CET en Baiona. Y, claro, todavía estoy restableciéndome del accidente que sufrí en Teo este verano mientras entrenaba.

– ¿Recuerdas cómo sucedió?

– Perfectamente. Fue subiendo una piedra, y al saltar para la siguiente la moto no agarró bien y me di con la cara contra la piedra de enfrente.

– Tu regreso en Baiona a finales de 2015 fue una excelente noticia para todos. ¿Confiabas en reaparecer tan pronto y así de bien?

– No, no. Que va. La verdad es que no contaba con estar listo para Baiona. Pero por suerte, la semana anterior los médicos me dijeron que ya podía ir en moto, así que retomamos los entrenamientos. Poquito a poco.

– Y ahora, a punto de comenzar la temporada 2017, ¿ya estás totalmente recuperado?

– Sí, aunque todavía me quedan algunas operaciones en la mandíbula, que hasta dentro de varios años no terminaré, pero yo ya me encuentro perfecto.

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– ¿Sabes que desde que debutaste en el Nacional en 2012 y tras pasar por tres categorías distintas hasta finales de 2005 acumulabas 14 victorias y que sólo dejaste de ganar en dos carreras?

– ¿Sí? No había echado cuentas, la verdad. (Sonríe).

– El cambio esta pasada temporada a TR2 ha sido más complicado pero aún así has logrado tu primera victoria en la última cita y has terminado cuarto…

– Este ha sido un año positivo, nos estrenábamos con una nueva moto a la que me costó un poco adaptarme, pero con el paso del tiempo cada vez me encontraba más a gusto. TR2 no es una categoría fácil, en ella hemos coincidido muy buenos pilotos la temporad pasada, y en donde se podía ver por los resultados finales que una mala carrera te podía hacer pasar de un primer puesto al quinto fácilmente

– ¿Cómo ha sido esta temporada 2016 en el CET TR2, satisfecho con los tres podios obtenidos?

– Estoy contento con esta temporada, aunque me habría gustado poder estar en el podio final, a principio de temporada no contábamos con hacer podios, y menos ganar alguna carrera, por lo que el balance es positivo

– En el Mundial comenzaste realmente bien en Cal Rosal con un tercer puesto en la primera jornada de Trial2 pero después… ¿qué sucedió?

– El campeonato mundial es bastante oscilante debido al reglamento Non Stop que tiene, fue mi primera carrera, en donde me encontraba muy relajado y con ganas de disfrutar la experiencia, y junto con un terreno que me gusta conseguí esa posición.

– Volviste en Francia pero los resultados ya no fueron tan buenos…

– Las próximas carreras ya no fueron tan bien, la mayoría eran en mojado y los nervios también se notaron. Empezar tan bien el año te deja un sabor agridulce, ya que después de todo nunca quedas satisfecho porque sabes que lo puedes hacer mejor

– Qué tal te ha sentado el cambio de marca, ¿te ha costado adaptarte a la Montesa 4tiempos?

– La verdad es que al principio no sabía bien cómo llevar la moto, es una conducción muy diferente a las 2tiempos, y aún a día de hoy sigo aprendiendo pequeños trucos para pilotar mejor la moto

– En el Mundial 2017 correrás en categoría Trial2 de nuevo con Montesa ¿Qué esperanzas tienes?

– Este año el objetivo es entrar entre los 10 primeros del campeonato del mundo, y en el campeonato de España trataré de luchar por la victoria.

– Y recientemente has estado en el IX Stage Spea Primavera del trial… ¿Que tal ha ido?

– Ha sido una gran experiencia, los stages de la Federación siempre están muy bien, en esta ocasión hemos ido a La Clua durante tres días y es una experiencia de la que se aprende mucho y sirve para estrechar lazos con otros compañeros

– Nadie diría que empezaste a practicar trial a los 10 años y un poco por casualidad, tras haber probado otras especialidades de la moto como el MX o el enduro.

– La verdad es que fue un golpe de suerte. Compramos una Beta de 80cc de segunda mano para andar un poco por el monte. Y un día fuimos a ver una carrera del Campeonato de Galicia de Trial. Me gustó mucho lo que vi. Pues bien, la temporada siguiente decidimos comprar una Gas Gas y apuntarnos al campeonato a ver qué tal. Y hasta ahora.

– ¿Se te daban igual de bien el MX y el enduro?

– (Sonríe). Sí, sí. Bueno, más bien el cross. Lo probé con 8 años. Y me tocó correr contra pilotos como Jorge Prado y Rubén Fernández –NdR: El primero, flamante Campeón de Europa de 125 y debutante en 2017 en el Mundial MX2, y el segundo, Campeón de España en MX125 –. Y bueno andaban un poco más que yo. (Vuelve a sonreír).

 – Lo que sí se te daba bien de verdad era competir, pero en atletismo.

– Lo dices porque de pequeño fui campeón gallego de triatlón en pista, ¿verdad? (Nueva sonrisa).

– El culpable de que te gusten las motos es tu mochilero; tu padre.

– Pues sí. Mi padre siempre tuvo motos de enduro y motocross. De hecho, la única que no tuvo fue moto de trial. Bueno, hasta que nos metimos en este mundillo.

– Tu formación como piloto ha sido más bien autodidacta y siempre con tu padre como instructor, aunque él no hace trial, porque no tenías amigos o gente en O Rosal, donde vives, con la que poder entrenar y aprender. ¿Todavía es así?

– Todavía. Sigo entrenando solo. Por desgracia, en O Rosal, mi pueblo, no hay trialeros.

– De ti, tu padre destaca: tu capacidad de sacrificio y tu excepcional visión de las zonas; a día de hoy le sigue sorprendiendo la manera en la que hallas siempre la mejor trazada posible. ¿Estás de acuerdo?

– Sí. Es lo que siempre me dice que hago mejor. Y bueno yo también destacaría nuestra capacidad de sacrificio. Suya y mía. Y es que nos hace falta mucha a los dos porque al entrenar solos… Hay que limpiar monte, inventar zonas, etc.

– Lo que me ha sorprendido es que cuando entrenas te concentras escuchando música rap: Eminem y SFDK, un grupo sevillano.

– (Sonríe). Todavía lo hago, pero con la música ya sabes que uno va cambiando de gustos con la edad, y ahora tengo un repertorio mucho más grande y variado. (Vuelve a sonreír).

– Por cierto, aún sigues «trameando al límite»? ¿Qué es eso de tramear?

– (Esboza una gran sonrisa). Bueno, con los estudios tengo menos tiempo de divertirme, y el tiempo que me queda lo dedico a entrenar. ¿Tramear? Viene de tramo, de un tramo de rally, y lo que hacíamos mis amigos y yo era tirarnos por las cuestas de mi pueblo con lo que ¡¡tuviésemos!! (Ríe).

– Muchos ya te comparan con Jorge Casales, paisano tuyo y creo que uno de tus pilotos favoritos.

– Me alegra saber que hay gente que me compara con Jorge, pero todavía me queda mucho camino por recorrer para llegar a su nivel. Es uno de los mejores pilotos del mundo. Y a pesar de su lesión a principios de 2015 acabó en muy buena forma y con muy buenos resultados. Es uno de los grandes.

– ¿Te ves dentro algún día entrenando o compartiendo equipo con él?

–  Ojalá. Eso sería un sueño.

– Pero también te gustan Albert Cabestany, Toni Bou y Adam Raga.

– (Sonríe). ¡¡Por supuesto!! ¡¡Son los mejores pilotos del mundo!! (Vuelve a sonreír).

– Y si falla lo del trial, por lo menos iremos bien en clase, ¿no?

– De momento trabajando mucho, pero perfecto. (Sonríe).

– Aunque creo que no le haces ascos a probar suerte en el enduro, como han hecho otros trialeros como Laia Sanz o Alfredo Gómez.

– Hasta hace un año tenía una Kawasaki de 85cc con la que iba al monte con los endureros de O Rosal. Pero la vendimos porque me quedaba pequeña, y la verdad es que ya llevo más de un año sin hacer enduro.

– ¿Y qué podemos esperar de Gabriel Marcelli para 2017?

– Os podéis esperar un Gabriel con más experiencia, más ilusión y con más ganas de conquistar las metas que año a año se van superando.

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