El Moto Club Kabras se puso una vez más en marcha para organizar el Trial de Sorauren, puntuable para los campeonatos de Navarra y de La Rioja, no siendo puntuable esta vez para el vasco. Un trial que se caracterizó por la baja participación.
Miguel Ángel Jiménez, Carlos Monreal y Mario Santolaya, los mejores en Sorauren
El pasado domingo 12 de mayo el moto club Kabras organizó un trial más, puntuable en este caso solo para los campeonatos navarro y riojano. No así – una pena – para el vasco, que este año solo ha asumido una prueba en esta provincia, a principios de la temporada – Estella -.
Este trial se ha caracterizado por los siguientes elementos…
En primer lugar, una baja participación. Dado que, como hemos comentado, este trial no era puntuable para el campeonato de Euskadi, muchos vascos habituales dejaron de acudir. También hubo coincidencia con cursillos u otros triales de provincias o Comunidades relativamente cercanas, lo que disminuyó también el número de participantes, como en el caso de los Alevines. También hubo algún lesionado – como Andoni Pérez, gran promesa de esta especialidad, quien se hizo mucho daño en Andorra y al que deseamos lo más rápida recuperación – y alguno corriendo en Escocia – como Miguel Ángel Bermejo -.
Y, aunque parezca una paradoja, tampoco ayuda en este aspecto la proliferación de triales; si hay pocos, los pilotos acuden en masa; pero, si hay muchos – o incluso demasiados -, entonces en todos los sitios las inscripciones bajan y los clubes lo notan, como en este caso.
Por todo ello no llegó a cuarenta el número de participantes que tomaron la salida, cuando lo habitual, deseado y esperable era algo como 60 ó 70.
En segundo lugar, el moto club Kabras marcó un trial difícil y selectivo. El terreno de Sorauren es complicado; está principalmente en cuesta, el terreno es traidor – hay vegetación, agujeros, canales -, hay mucha piedra suelta y rampas empinadas. Por todo ello el club marcó zonas largas, difíciles y selectivas. Aunque se buscó la falta de riesgo en la medida de lo posible, hubo varias caídas en todas las categorías – afortunadamente sin consecuencias -, pues, como digo, el terreno aquí es incómodo y poco amigable, aunque permaneció invariable y con un agarre aceptable durante todo el trial. Pero la gente quedó en general contenta, pese a que la mayoría de los pilotos se llevó en ocasiones un buen número de puntos. Pero, como decimos, gustó el hecho de haber marcado así.
La organización dio cuatro horas y media para realizar siete zonas sobre una bonita interzona de unos tres kilómetros; el tiempo fue muy sobrado. Y el meteorológico acompañó, pues lució el sol todo el día, hubo vientecillo refrescante y no pasamos calor.
La organización en conjunto fue muy buena, con jueces de zona que cada vez lo hacen mejor; esa fue la impresión general. Pasemos a comentar cada categoría.
TR1: Carlos Monreal, a punto de igualar a Miguel Ángel Jiménez
Es habitual que Miguel Ángel Jiménez acabe estos triales sin penalización. Por eso casi es noticia decir que ha penalizado algo. En Sorauren se dejó un único pie, así que, una vez que nos hizo disfrutar con su dominio sobre su GasGas, pasamos a fijarnos en los demás mortales.
El campeonato es claramente de Miguel Ángel; lo disputado de verdad es el segundo puesto, que trae unas batallas muy interesantes entre Carlos Monreal, el catalán Adriá Albejano, Miguel Ángel Bermejo y Andoni Pérez habitualmente. Pero ante la ausencia de los dos últimos, Carlos y Adriá pelearon muy intensamente por el segundo puesto del podio. Carlos estuvo sensacional, y en esta ocasión no solo claramente batió a Adriá, sino que estuvo a punto de discutirle el primer puesto al dios local Jiménez. Carlos hizo la segunda vuelta sin penalizar, y en la tercera se dejó un único pie. Lástima que, en la primera vuelta, cometiese un fiasco en la zona tres, lo que hizo que acabase con 8 puntos frente al único pie, ya comentado, de Jiménez.
Tras estos dos fenómenos, Adriá acabó con quince puntos – gran tercera vuelta – y, por último, Rubén Ortega con 35.
TR2: Mario Santolaya, como un cohete
Si vemos la puntuación de Mario – 6 puntos (4+2+0) – y las de los que le acompañaron en el podio – Tapi Armañanzas 35 e Íñigo Lázaro 38 -, nos damos cuenta de que Mario se salió el domingo. Las zonas para los azules no eran nada fáciles, ciertamente, pero para Mario lo parecían. Este chico apunta a correr en rojos muy pronto, pues en 2019 ha ganado siempre a todos los azules con los que se ha enfrentado, con lo cual marcha muy destacado en cabeza del campeonato navarro/riojano.
Detrás de él, fue una agradabilísima sorpresa el magnífico segundo puesto de Tapi Armañanzas, que cada vez sube al podio en más ocasiones. Le ganó por tres puntos a otro de los favoritos indiscutibles de esta categoría, Íñigo Lázaro, y por cinco a Markel Iturria, otro de los buenos pilotos peleones destacados este año.
Muy interesante también el regreso a la competición de Eduardo Goicoechea, piloto habitual de TR1, que, por cuidarse tras una mala lesión el año pasado, ha decidido volver a correr con precaución bajando temporalmente a TR2. Eduardo quedó quinto, superando al jovencísimo Marcos Bermejo (otra promesa muy destacada), a Javier Sáez Argomániz, a Iban Díaz de Guereñu y a Aitor Legarda.
TR3: Todo queda entre los tres magníficos, (Ernesto, Diego y Mikel)
El campeonato navarro/riojano está resultando disputadísimo entre estas tres fieras: Diego Pérez Nicolás, Ernesto Jiménez Cacho y Mikel Lertxundi. Los tres acuden como clavos a todos los triales, los tres acaparan habitualmente los tres cajones del podio y también los tres han pisado el más alto, así que más competencia no puede haber. Hoy Ernesto (15 + 8 + 9 = 32) ha sido el mejor, y eso que muchos coinciden en que, en conjunto, las zonas para verdes han sido las más difíciles de este trial – buscar el varios en lugar del fiasco ha sido frecuente -.
Diego, como era de esperar en él, hizo un buen trial absolutamente regular (13 + 13 + 13 = 39) y quedó segundo, mientras que Mikel fue, en nuestra opinión, el que más mérito tuvo, pues, ya que su hijo Haitz corre en Alevines.
Mikel dedicó la primera parte del trial – las dos primeras horas – a acompañar a su hijo; cuando este hubo acabado – ganando, pues el pequeño Haitz también promete -, Mikel se reincorporó a hacer su trial, obviamente sin las referencias de sus rivales. Como el tiempo dado fue suficiente, Mikel se concentró en la labor y logró un muy meritorio tercer puesto con 46 puntos (16 + 15 + 15).
Detrás de este trío vimos cosas interesantes. Para empezar, los Albisua padre e hijo – Aimar y Gaizka – compiten juntos, haciendo el padre, Gaizka, de mochilero del jovencísimo Aimar a la vez que él mismo compite también. Aimar es un chico con muy buen estilo y muchas ganas; desde su reciente etapa por amarillos – hace nada, vamos – hasta hoy se nota su progreso. Y hoy, como lleva haciendo toda la temporada, le ha vuelto a ganar a su padre. Muy bueno ese cuarto puesto, Aimar.
En quinto lugar quedó otro chaval, el valentísimo Eneko Martínez Urquijo, que ya es como la mascota de todos nosotros. Con su pequeña GasGas lleva años enfrentándose valientemente a las zonas de los mayores; primero lo hizo en amarillos y ahora lleva esta temporada haciéndolo muy bien en verdes.
Detrás de Eneko quedaron Chuma Vicuña, José Luis Amilibia, el mencionado Gaizka Albisua e Iker Gavilán, todos ellos con puntuaciones altas debido, como hemos dicho, a la especial dificultad de las zonas para esta categoría.
Un único retirado: el joven y también valiente Iñaki Iriarte, quien mostró signos de cansancio y falta de entrenamiento, seguro que para la próxima llegará más entrenado y tendrá una mejor actuación.
TR4: La veteranía de Paco Antolín es un grado
En esta categoría de los amarillos, la disputa por el primer puesto final del campeonato está claramente protagonizada por el palentino Paco Antolín y el joven Daniel Ramírez de Arellano, con otros cuantos pilotos acechando – Luis Castellanos, Raúl Fernández García, Aitor Urquiza, Jaime Blasco, Javier Albero… -. A Sorauren no acudieron ni Luis Castellanos ni Aitor ni Javier, así que la cosa se quedó en cinco o seis candidatos. Daniel Ramírez de Arellano es muy habilidoso, y es capaz de hacer unos ceros muy bonitos; pero cuando un trial se le atraviesa, entonces pone demasiados pies y queda lejos del podio.
Y eso es lo que ha pasado hoy. Paco Antolín es todo un veterano y tiene un buen dominio de sus motos – y hablo en plural porque cada día se compra una nueva -, y en los triales difíciles hace notar su técnica de pilotaje y su fortaleza física. Las zonas para los amarillos en Sorauren eran largas y no fáciles, aunque sin riesgo. Pese a ello hubo bastantes fiascos por ahí repartidos – algunos por saltarse puertas al no recordar donde estaban en las vueltas anteriores, por ejemplo – . Antolín solo cometió un único fiasco, al derribar una flecha de paso en la zona dos. Y todo lo demás fueron ceros y unos, así que, con 16 puntos (4 + 8 + 4), se llevó muy merecidamente el primer puesto del podio.
Ya que hoy Daniel no estaba en su mejor estado de forma, fue su amigo y compañero Raúl Fernández quien le plantó cara a Antolín. Raúl lleva poco tiempo compitiendo y la verdad es que se le nota el progreso día a día, y siempre en el podio. Con 21 puntos (5 + 9 + 7) hizo un magnífico segundo puesto.
Y la sorpresa surgió en la pelea por el tercer puesto. Todos esperábamos ver allí a alguno de los mencionados arriba, pero no fue así… Y es que el veterano José Ignacio Urmeneta, obrando milagros para encontrar equilibrio y tracción sobre su Bultaco Sherpa azul, empató con Jaime Blasco – otro que en cualquier momento está muy arriba en las clasificaciones – a 28 puntos, siendo necesario el desempate por ceros: José Ignacio había marcado once ceros, mientras que Jaime sólo hizo uno menos (¡!), así que fue el bultaquista quien ascendió al tercer peldaño del podio. José Ignacio era el único que se presentó con una clásica; él mismo prefirió integrarse con los amarillos para medir fuerzas con sus semejantes. Y quedó muy bien, como vemos.
Tras Urmeneta, se clasificaron seis pilotos más: Daniel Ramírez, Francisco Javier Aguado San pedro, José Miguel Amondaráin, Pedro Jiménez Cañamero, Ramón Aldasoro y el veteranísimo francés Guelot Daniel Jean Adolphe, quien aportó el toque internacional a este bonito y difícil trial.
Alevines: muy pocos pero buenos
Habitualmente compiten en esta categoría entre cinco y seis niños y niñas; sin embargo, en esta ocasión tan solo comparecieron dos: Haitz Lertxundi y Iosu Echeverría, pues las chicas que suelen competir con ellos estaban en un cursillo y no pudieron acudir. Así que entre ambos, apoyados y ayudados por sus padres, se enfrentaron con las cinco zonas especialmente preparadas para ellos. No resultaron fáciles – alguna, casi imposible para su fuerza física – y por eso penalizaron bastante: Haitz sumó 36 puntos y Ion 42. Por eso sus padres, con muy buen criterio, les animaron a superar las dificultades, utilizando esta experiencia como algo positivo de lo que aprender en la vida. Muy bien, pues, a todos ellos.
Juveniles: «El Rubio» se atreve con todo
Un único participante en esta categoría: el pequeño Íñigo Iriarte, alias «el rubio», quien, con su pequeña 80, se atreve habitualmente con las zonas de los amarillos. Íñigo hizo, como era de esperar, muchos puntos, pero, al igual que lo comentado en el párrafo anterior, esta dureza le sirvió para ir forjando el carácter que todo trialero debe tener, y es el de no amilanarse ante las dificultades y esforzarse por superar las dificultades que este deporte tan bonito plantea. Ánimo, Iñigo.
El próximo trial de este campeonato es este domingo 19 en Rincón de Soto, la Rioja. El siguiente es en Bearin, Navarra, organizado nuevamente por el moto club Kabras. Os esperamos.
Clasificación trial de Sorauren 2019
Galería de fotos trial de Sorauren 2019: