Reportaje post - Indoor de Girona

Toni Bou se llevó también con el triunfo en la tercera y última cita de la temporada del Campeonato de España de Trial Indoor alzándose de este modo por séptima vez consecutiva el máximo galardón nacional en esta especialidad. En este post – reportaje ampliamos la información inicial, analizando más en detalle este indoor, realizamos alguna crítica constructiva sobre lo que está siendo el «aburrido» CETI 2013 y os mostramos 10 videos del Indoor de Girona, incluyendo el «timelapse» del montaje».

El juego del lobo

El Campeonato de España de Trial Indoor lleva siete años siendo uno más de los juegos de lápiz y papel con los que se divierte Toni Bou en solitario. Bueno, éste, así como los Campeonatos del Mundo de Trial al aire libre y bajo techo. Sin embargo, es en el CETI donde el piloto del Repsol Montesa-HRC cuenta aparentemente con una invulnerabilidad mayor. No en vano, desde finales de 2008, no conoce la derrota en la competición doméstica de pista cubierta. Es decir, encadena cinco años imbatido. Cierto es que en momentos puntuales a lo largo de todo este lustro sus rivales, Adam Raga, Albert Cabestany e incluso Jeroni Fajardo, han logrado llevarlo hasta el límite. Pero por desgracia para sus intereses el desenlace de las carreras siempre ha sido el mismo: Bou, primero, y ellos, segundos.

En Girona, tercera y última cita de este 2013, el campeón en título no necesitaba ni tan siquiera pasar a la final para coronarse nuevamente. Le bastaba con ser quinto tras haber ganado en Málaga, la primera prueba de la temporada y puntuable para el Mundial de la especialidad, y escasas semanas antes en Zaragoza. De ahí que para los aficionados la única emoción residiera en conocer en qué orden iban a ser este año Albert Cabestany y Jeroni Fajardo sus acompañantes en el podio final del certamen. No en vano, apenas un punto les separaba a ambos.

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Insaciable

Pero Bou, al igual que el lobo que luce en su moto como mascota, sigue siendo por naturaleza un depredador nato de récords. De ahí que desde el primer obstáculo el del Repsol Montesa-HRC partiera en pos de una nueva victoria; en búsqueda de su particular tres en raya de esta temporada.

Saltó al Pabellón de Fontajau como compañero de vuelta de Jeroni Fajardo, siendo ambos la última pareja de pilotos en liza. Anteriormente, se batieron el cobre el local Marc Prat contra Pol Tarrés, los dos procedentes del CETI 2 –la previa que disputan durante la mañana los pilotos con más proyección de este deporte–; Francesc Moret versus Pere Borrellas, los dos últimos ganadores del CETI 2; y Adam Raga, campeón del CETI 2005, contra Albert Cabestany, el mejor en el CETI 2006.

Pues bien, ya en el primer obstáculo de la primera sección a superar, los cilindros Burn, Bou dejó claro que estaba dispuesto a finiquitar su enésimo título por la vía rápida.

En aquellos momentos, Tarrés, con un total de 21 puntos marcaba la frontera de la clasificación, por detrás de Raga, con 19, y de un eléctrico Cabestany, con sólo 3 penalizaciones en su casillero.

¿Su concurso? Peor que el de Cabes en las zonas, pero mejor en cuanto a penalizaciones por tiempo se refiere. ¿Resultado? Empate a puntos entre los dos que, sin embargo, se resolvió en la carrera en paralelo entre ambos –la zona de desempate establecida por la organización– a favor de Bou. Ni los más ancianos del lugar recuerdan ya la última derrota sufrida por el de Montesa-HRC en un enfrentamiento directo contra uno de sus rivales en este tipo de sección. Ni en el CETI ni en el Mundial Indoor.

Así pues, Bou, Cabestany y Fajardo, los mismos protagonistas que en Zaragoza, se iban a jugar nuevamente la victoria. El primero en romper el hielo, Fajardo. El piloto de Beta, muy motivado tras haber mantenido en jaque a Bou en la cita anterior hasta la mismísima última sección, tuvo en esta ocasión menos acierto. Y ya en la zona 2 y 3, con dos fiascos, quedó prácticamente descartado para el triunfo final.

Por el contrario, el pulso entre los vigentes campeón y subcampeón mundial de la especialidad prosiguió vivo hasta los últimos compases de carrera. Sin ir más lejos, se llegó hasta la zona 6 –la de los números 1 Freixenet–, con ligera ventaja de Bou. Sin embargo, un escalón a mitad de sección, con un desnivel de 1 metro y 70 centímetros, podía hacer cambiar las tornas entre ambos. El primero en atacarlo fue el piloto de Sherco. Pero se quedó.

De lograr Bou el mismo resultado habría que esperar a la zona de los saltos de piedra en piedra tal río se tratara haciendo la cabra, la especial y última, para conocer el nombre del ganador. Pues bien, no hizo falta. El campeón de todo obró su magia una vez más y sorteó dicho obstáculo, así como la sección al completo, colocando un pie.

Los tres pilotos cerraron la prueba cayendo en el mismo punto en la zona especial, anotándose dos puntos.

Sin embargo, y a modo de colofón, el speaker del evento, Cesc Vila, invitó a Bou a que intentara nuevamente la proeza de saltar de roca en roca sin tocar el suelo. ¿Llegaría al final de la sección? Lo logró desatando con ello la explosión de euforia y alegría entre todos los aficionados allí reunidos.

Por cierto, con ésta, Toni Bou ya atesora cinco victorias seguidas en Girona, con lo que se encuentra a sólo una de Marc Colomer como piloto con más triunfos allí.

Todos somos el CETI

Una reflexión, el CETI siempre ha sido el mejor banco de pruebas para los nuestros de cara al Mundial Indoor de la temporada siguiente. Como siempre ha reconocido el británico Dougie Lampkin, competir contra los españoles en pruebas cubiertas era como enfrentarse a una maratón sin entrenamiento y habiendo caminado apenas quince minutos el día antes. Pues bien, en las últimas temporadas, ya sea por la crisis económica o porque la fórmula está agotada, se está secando lentamente este bebedero de campeones. No en vano, sus tres campeones, Raga, Cabestany y Bou lo han sido también en la máxima competición mundial.

Por favor, hagan algo para que no desaparezca. Las nuevas generaciones necesitan seguir aprendiendo de y con los mejores; continuar fogueándose y puliéndose. Sólo así, nuestro país y sus pilotos, prolongarán en el tiempo su actual hegemonía. Dos carreras al año. Bueno, tres si contamos Málaga. No son suficientes.

Y otra cosa. Los chicos que toman parte en el CETI 2 se merecen que la gente los vea. Habrán los pabellones para que el público y los aficionados a este deporte los descubra y contemple su evolución. Ellos son nuestro futuro.

Para finalizar, sólo una nota más, por favor, innoven el espectáculo del CETI, las zonas ya están más que vistas, son lentas y aburridas, los aficionados al trial merecemos también aquí indoors espectaculares con zonas cuidadas y variadas como las que disfrutan de nuestros vecinos franceses en sus indoor temáticos.