Navalafuente acoge por primera vez el Campeonato de Madrid de trial "de niveles"
La localidad de Navalafuente se estrenó el pasado año en el trial madrileño acogiendo con éxito una prueba del Trofeo de clásicas, y en esta ocasión acogía por primera vez una prueba del Campeonato de la Comunidad de Madrid de Trial de modernas o "niveles" en un día pasado por agua pero muy trialero. Siempre son buenas noticias que haya Ayuntamientos de la Comunidad de Madrid dispuestos a colaborar en la promoción del deporte y más si se trata de actividades tan atractivas e interesantes para público y aficionados como es el trial. Este es el caso de Navalafuente, en la sierra norte de Madrid, que ya se estrenó el año pasado dando acogida a la última cita del Trofeo de clásicas y que en esta ocasión lo hacía para el Campeonato de modernas, en un trial organizado por el Moto Club Mobbers. Estas dos competiciones de trial han servido para demostrar que el deporte del equilibrio sobre la moto nada tiene que ver con la concepción que otros tienen de las motos y que se trata de una actividad completamente compatible con la naturaleza y con nulo impacto perjudicial sobre el terreno. Y tanto el año pasado como este, lo más curioso del trial de Navalafuente fue que bastante público quiso acercarse a ver el espectáculo, a pesar de que en ambas ocasiones el cielo gris y la lluvia fueron los protagonistas. Efectivamente el día comenzaba con lluvias bastante fuertes que continuaban la racha de los días anteriores, pero afortunadamente para todos, al poco de comenzar la prueba la intensidad de la lluvia iba bajando hasta parar definitivamente, quedando un día magnífico para disfrutar del trial y de la naturaleza. El terreno estaba ideal para los amantes del trial más auténtico al estilo británico, con barro y zonas resbaladizas, principalmente de piedra granítica. La poca adherencia del terreno fue acertada o este trial se ha convertido en sinónimo de trial apetecible y esperado por todos los aficionados. El Ayuntamiento de Siete Iglesias, Lozoyuela y Navas ha apostado por el deporte del trial y ha demostrado que entiende perfectamente lo que significa el trial, un deporte sano, atractivo, para todas las edades y que por supuesto no daña la naturaleza sino que puede convivir perfectamente con esta. La demostración de esa lógica apuesta se ha trasladado este año a la celebración de una cita del Campeonato de España con los mejores pilotos del mundo, que después de varios años de ausencia volvían a Madrid para que tanto pilotos como aficionados disfrutasen de un magnífico trial.
Ahora llegaba el turno del trial para el campeonato madrileño, y una vez más todos pudimos disfrutar de un excelente trial, bien planteado en todos los sentidos y perfectamente organizado. Y es que poco a poco se va notando el esfuerzo que hace la FMM para volver a realizar triales bien hechos y al gusto de los participantes. El nivel organizativo empezó bajo y con muchas críticas en la primera prueba celebrada en Cabanillas, después mejoró notablemente en Valdemanco como era de esperar, y con el retorno de las pruebas organizadas directamente por la FMM, en Zarzalejo se notó un gran cambio a mejor que ha continuado en este trial de Siete Iglesias, que ha superado al anterior, no en cuanto a nivel organizativo, que ha sido el mismo, sino en cuanto a la belleza del trial y las zonas. Esto se ha debido a que, como en años anteriores, en Siete Iglesias se puede disponer de un largo recorrido, en torno a los 9 kilómetros, y unas zonas variadas y bien marcadas para cada categoría.
Cada vez resulta más evidente que el aficionado quiere triales con recorrido, ya que esto aporta belleza al trial, da sensación de haber pasado una mañana mucho más completa y aprovechada, y además ayuda a que el pelotón de pilotos se distribuya y no haya colas a la entrada de las zonas. De echo cuando los triales dejaron de tener recorrido muchos abandonaron este deporte para pasar al enduro. Si a las ventajas que aporta un trial con recorrido más largo le sumamos que en esta ocasión los seguidores y público podían llegar fácilmente a la mayoría de las zonas, entonces el resultado es un trial perfecto en el que todos han sido tenidos en cuenta. Este fue el caso, ya que dando un paseo de poco más de 5 minutos se llegaba hasta la zona 1, y muy cerca estaban la 2 y 3. Para acceder a las zonas 5, 6, 7 y 8 había que tomar la misma ruta que en la prueba del Campeonato de España, pudiendo llegar cómodamente en coche en un momento. Gran detalle fue el repartir una hoja explicando como acceder a todos los participantes antes de la salida, así como las peculiaridades del trial.
Esto demuestra que cada vez hay mayor interés por hacer bien las cosas y por conseguir que los triales vayan mejorando en su ambiente y participación, y no sólo entre los pilotos sino también entre sus acompañantes y el posible público. Con mejores triales aumenta paulatinamente la participación, y por supuesto el disfrute de los inscritos, que hace merecer la pena el tiempo y gasto invertidos. Entre las peculiaridades de este trial, además del recorrido de unos 9 kilómetros, estaba que la mesa de inscripción se trasladaba una vez comenzada la prueba a un punto del recorrido situado entre la zona 8 y la 1, con lo que no había que cruzar el pueblo en cada vuelta aunque la salida se hiciese desde la plaza de Siete Iglesias. El trial constaba de 8 zonas a 3 vueltas para los niveles A, B, C y D, mientras los pilotos de Iniciación hacían 8 zonas a 2 vueltas y los Infantiles podían realizar una sóla vuelta con dos pasadas consecutivas por zona o bien optar por dar 2 vueltas completas con una pasada por vuelta a cada zona.
Este sistema permitía que los más pequeños también disfrutasen del recorrido sin prisas y sin que esto les supusiese un problema, ya que la mayoría optó por dar una sóla vuelta tranquilamente. El tiempo máximo para terminar el trial daba de sobra para tomarse las cosas con tranquilidad, sobre todo quienes sólo tenían que hacer una o dos vueltas, ya que era de 5 horas más 20 minutos con penalización. Las zonas fueron principalmente de piedra granítica, con escalones, subidas y bajadas, y piedra suelta, destacando la espectacularidad de las cuatro zonas marcadas en la cantera, el mismo lugar en el que hace bien poco pudimos ver en acción a pilotos como Bou, Raga, Cabestany, Fajardo o Fujinami, aunque como es evidente en unas zonas de diferente nivel... En esta ocasión incluso se pudo aprovechar el agua de la laguna para una de las zonas, haciendo que las ocho fuesen bastante variadas. El marcaje de las zonas también está mejorando paulatinamente, cada vez es más natural, más abierto y aprovechando la "trazada natural".
Ya apenas se ven los antes habituales pasos estrechos, ratoneros y retorcidos en los que había que pasar entre picos y piedras raspando los cárteres, rompiendo palancas de freno y embrague, además de algún que otro golpe en los pies y no por apoyarlos precisamente. Las zonas son cada vez más bonitas y bien marcadas y esto es lo primero que notan y agradecen los participantes. El nivel de las zonas también está mejorando mucho, como se puede ver en las puntuaciones, ya que por lo general las zonas fueron muy adecuadas para cada categoría, no marcadas sólo para los de arriba sino para todos. Aunque sigue habiendo pilotos que quizás podrían estar en una categoría superior, pero esto es debido a las cosas que se han hecho mal en el pasado marcando zonas sólo para los primeros, y ya tiene difícil arreglo salvo demostrar que el nivel va a seguir siendo homogéneo y adecuado como en los dos últimos triales. En este sentido es importante el tema de la peligrosidad, se pueden marcar zonas muy selectivas y hasta difíciles que no sean en absoluto peligrosas.
Para eso en cada categoría hay que tener en cuenta algunas cosas básicas, como no escalones en amarillos, que estos sean moderados en verdes, no cortados donde picar de carter o voladas obligatorias en azules, y siempre marcaje lejos del borde de cortados, piedras de punta o similares. Otro punto a tener en cuenta al marcar las zonas para cada categoría es el del esfuerzo físico, tiempo en zona y relacionado con ello, los cambios en parado. En amarillos no debe ser necesario por lo general realizar cambios en parado salvo en alguna zona concreta y puntual, en verdes puede ser algo más usual, pero también en algunas zonas en concreto, en azul ya puede ser algo habitual en casi todas las zonas (no tiene porque ser en todas), pero no convertirse en algo excesivo y obligado en tres pasos por zona o más, lo que hace ralentizar demasiado el paso, formar colas y ahuyentar a los participantes más veteranos, mientras en rojo puede ser mucho más habitual pero tampoco hasta el límite de que se tarde más de un minuto en efectuar cada zona, provocando el aburrimiento de los que esperan.
La mayoría de los aficionados piensan que cuanto más dinámicas sean las zonas, mucho mejor para todos. Esto fue bastante bien en este trial, con unas zonas muy adecuadas para cada nivel, aunque quizás en el nivel azul algunas zonas fueron excesivamente lentas y algo retorcidas, abusando de los cambios en parado, que deberían limitarse a uno o dos por zona y no siempre. A destacar también los jueces de zona, cada vez mejores y más comprensivos. Además esta vez no tuvimos que soportar los absurdos comentarios de que hay que tener el casco puesto para ver la zona, cosa que sólo se da en el Mundial y que allí puede ser lógica. Con el calor que hacía se agradeció que ningún juez nos diese "la paliza" con el tema del casco. En definitiva, un bonito trial en el que se pudo disfrutar del trial que gusta a los aficionados. Una jornada agradable en la que a pesar del sol y las altas temperaturas, la brisa que soplaba en algunas zonas ayudaba a refrescar el ambiente.
También fue un acierto realizar la entrega de premios en el bar, así muchos esperaron tranquilamente tomando algo, y por primera vez en mucho tiempo todos los podios estuvieron completos y sin ausencias. Esto significa que cuando se hacen las cosas bien, todo el mundo lo agradece y se recibe la recompensa, y todos contentos, pilotos, organizadores, federación, jueces, acompañantes... Que siga así y veremos como el trial en Madrid mejora cada día. Repaso por categorías Esta vez vamos a comenzar el repaso por las categorías inferiores, las que realizan los nuevos pasos libres, todo un acierto que va logrando cada vez más participación. La categoría Iniciación llegaba en este caso a su segundo trial, y se repetía el número de 7 inscripciones, y eso que aún muchos no se han decidido a debutar ni tampoco se han atrevido pilotos de clásicas habituales en categoría clásicos.
Las zonas libres a las que hubo que dar dos vueltas fueron de un nivel perfecto para aprender, y todos hicieron desde ceros hasta fiascos. Todos excepto el joven ganador, Gonzalo Mejías, que habiendo participado ya en algunos triales por el nivel D o amarillo sólo marcó 5 puntos y comprobó que su nivel seguro que es mejor de lo que pensaba y ya no es de un piloto de iniciación. Segundo puesto para el debutante Augusto Terol con 21 y repetía tercera plaza Guillermo Rodríguez con 25, quedando fuera del podio Ignacio López por sólo 2 puntos. En la categoría Infantil B, con 5 participantes, el nivel también fue perfecto, nada que ver con aquella primera prueba del año en la que todos sufrieron demasiado en las zonas y el recorrido. Eva Muñoz va progresando cada día, y con 3 puntos quedó claro que su nivel es mucho mejor ahora que hace un año, se llevó la victoria y se prepara para dar el paso a nivel amarillo próximamente. También Pablo García demostró buena progresión y terminó segundo con 6 puntos a pesar de un fiasco.
Completó el podio Pablo Rodríguez con 9, por lo que el trio de cabeza estuvo muy igualado. Javier Pérez y Alejandro Esteban completaban la clasificación. En el nivel amarillo "D", como siempre buena participación con 22 inscritos. En un nivel de zonas muy adecuado la lucha por la victoria estuvo apretada entre un buen grupo de veteranos y el joven Juan Iruela, que al final fue quien subió a lo más alto del cajón al sumar sólo 5 puntos, frente a los 7 de Paco Callejo, este con el mérito añadido de participar sobre su clásica Merlin. A un sólo punto se situaba tercero Miguel Sánchez Monje, y ya fuera del podio también mucha igualdad entre Adolfo Barreiro, Juan Pérez Cabrera, Miguel Fernández Cañete y Jesús Sanz, Mario Merino, y Miguel Fernández, que terminaron en este orden con triple empate en los puestos 7 a 9. En el nivel C o verde, es donde esta vez hubo mayor participación con 23 inscritos.
Las zonas fueron más sencillas que en los últimos triales, lo que se notó en las puntuaciones. La lucha por el triunfo también estuvo muy apretada entre cinco candidatos principales, y al final fue José García Golles "Sivis" quien se llevó el gato al agua al sumar únicamente tres puntos. A uno sólo se situaba Horacio San Martín "Yoyi" y con otro más era tercero Bertrán Martínez Peñalver, como veis más igualdad e intensidad imposible. A sólo un punto del podio se quedaron Diego Olave y José Miguel Herrero, y ya algo más atras completaban el top 10 Felix Iñiguez, Fernando Gutiérrez, Carlos Varadé, Luis Nieto y David Hernández. El nivel B tuvo nueve inscritos, por lo que aún sigue estando bastante por debajo de lo habitual hace unos años pese a las nuevas incorporaciones. Una vez más destacó Chema Quer, que con 7 puntos no tuvo rival. Pero la sorpresa la daba el joven piloto toledano Julián Montalvo, que si en la cita anterior subía por primera vez al podio, en esta ocasión mejoraba aún más y era segundo con 19 puntos.
Se nota que Julián sube con fuerza fruto del entreno y las ganas que le pone, el cambio de nivel que ha dado del año pasado a este se aprecia claramente a simple vista al verle evolucionar en las zonas y su última vuelta a sólo 1 punto así lo demuestra. En el tercer puesto se colocaba Roberto Bautista con 22 puntos, los mismos que el más veterano de la categoría, Francisco Guzmán. En el desempate ambos contaban con 22 ceros, pero Roberto tenía 4 unos frente a los 4 de Francisco. Buena evolución también la de otro veterano, José Luis Ruiz, que se quedó a sólo 5 puntos del podio. Y por último la categoría roja o A, esta vez estuvo bastante pobre, ya que estaban ausentes por diversos motivos algunos habituales, como Marcos Méndez, participando en el campeonato de Castilla León, Javi Cordero por estudios, o Nachette Fernández Sancho y Sandra Gómez, participando en el Gran Premio de España del Mundial. Así el piloto de Sigüenza Alejandro del Olmo se hizo con una clara victoria, seguido de Carlos Tejera, ya que David León se tuvo que retirar al romper varios radios y doblar la llanta delantera. De este modo esta prueba no puntúa para la general por falta del mínimo de participantes. Ahora toca el merecido descanso veraniego. El campeonato volverá después del verano con el trial de Hita (Guadalajara) el 23 de septiembre. Que tengáis buenas vacaciones.
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