Comienza el Campeonato de Madrid con aluvión de críticas
Inicio revuelto para el Campeonato de Madrid en sus categorías de modernas e infantil B, con un trial marcado por el frio y por una organización que cometió numerosos fallos causando el descontento generalizado. El Campeonato de Trial de la Comunidad de Madrid no se hizo esperar esta temporada y el pasado 12 de febrero daba comienzo en la localidad de Cabanillas de la Sierra, adelantándose en más de un mes respecto de lo habitual, con lo que los más ansiosos podrían calmar antes sus ganas de comenzar la temporada. Pero la casualidad hizo que la fecha coincidiese con la fuerte ola de frio y viento en toda la península, por lo que estos elementos fueron una de las notas condicionantes de este trial. Por la mañana los termómetros marcaban valores negativos pese al día soleado, pero lo peor eran las fuertes rachas de viento gélido que pusieron aún las cosas más difíciles a todos los presentes, tanto organizadores como pilotos, jueces de zona y seguidores.
Los primeros luchaban teniendo que recolocar las cintas que el viento se llevaba por delante, los segundos veían como en algunas ocasiones el viento les desviaba o desequilibraba en plena zona obligándoles a poner algunos pies de más, los jueces de zona aguantaban el frío como podían, abrigados al máximo y sin rechistar lo más mínimo, cumpliendo su trabajo de manera excepcional, mientras los seguidores se refugiaban del viento como podían. La localidad ya es vieja conocida por los aficionados, pero en esta ocasión el recorrido fue completamente distinto al del año pasado, dándose la salida desde el centro del pueblo y discurriendo por una larga y bonita interzona que en gran parte era la misma que cuando se disputó aquí el Campeonato de España hace algunos años. Las novedades principales que se estrenaban en este trial se limitaban al cambio en el reglamento RFME que permite el retroceso sin penalizar fiasco siempre que no haya pie a tierra y al estreno de la zona libre para los Infantiles C y de los pasos amarillos en lugar de verdes para los Infantiles B, algo que como era de preveer fue un fracaso, al igual que el trial en general, en el que se dieron una serie de circunstancias que provocaron que la gran mayoría de participantes volviesen a casa decepcionados y sin haber disfrutado este trial, tal como se reflejaba los días posteriores en el foro y en muchos intercambios de emails y llamadas telefónicas. Por tanto a diferencia de las anteriores temporadas, esta no ha comenzado con buen pie, lo que debe servir para cambiar todo lo que sea necesario y mejorar la situación del trial madrileño en sus categorías de niveles e infantiles. La baja inscripción en esta prueba, la primera del año, que suele ser numerosa, da muestra de que las cosas no se están haciendo demasiado bien en el trial de modernas, al contrario de lo que sucede en el de clásicas, y por primera vez en la historia del trial madrileño, la primera cita del campeonato de clásicas ha contado con bastantes más inscritos que el de modernas (86 frente a 64), un dato muy significativo.
El trial no se presentaba nada mal en un principio, con un terreno bastante bueno para hacer trial como es el Lanchar de la Condesa y las cercanías de Cabanillas de la Sierra, que ofrecen un bonito escenario y muchas posibilidades, y en el que destacó una larga y bonita interzona que incluso llegaba a cruzar la antigua N-I, donde se había colocado una persona para señalizar el cruce y dar el stop en caso necesario, todo un buen detalle de la organización para evitar problemas. Pero una serie de errores organizativos difíciles de comprender para la mayoría de los aistentes hicieron que lo que podía haber sido un buen trial fuese al final un desastre. La lluvia de críticas no se hizo esperar y ya en las colas de las zonas muchos mostraban su malestar y otros decidían retirarse y volver a casa. Cierto que el intenso frio y el viento influyó negativamente, pero los errores del trial cometidos por el MC Mobbers o lo que es prácticamente lo mismo, la FMM, no tuvieron nada que ver con esto. Para empezar las zonas no fueron del agrado de casi nadie, salvo de los pilotos de mayor nivel de las categorías A y B, primero por lo rebuscado del marcaje, muy retorcido, con pasos muy estrechos y "rasca estriberas", algunos desagradables y hasta peligrosos. Además el nivel de las zonas era excesivamente alto en las categorías B, C y D, por lo que nadie lograba comprender si lo que se pretendía era motivar la participación o todo lo contrario. Cada año se cometen los mismos errores, el nivel sube y sube, y pese a las quejas llega un año nuevo y nos encontramos con una nueva subida de nivel y además mucho más fuerte y exagerada que nunca. Mientras comunidades como Cataluña se dan cuenta de que el camino correcto para revitalizar el trial es justo el contrario, en Madrid se sigue tropezando una vez tras otra en la misma piedra, nunca mejor dicho. Pero no sólo las zonas no gustaron por su feo marcaje y excesivo nivel, también por su falta de dinamismo y su retorcimiento, con infinidad de pasos y flechas que en muchas ocasiones hacían que fuese imposible completarlas en menos de 2 minutos como poco.
Lógicamente esto se acentuaba en las categorías roja y azul, con muchos pasos lentos en los que parar y mover la moto, superar un escalón seguido de otro giro cerradísimo en el que parar y de nuevo mover la moto y así paso tras paso como si se tratase de un aburrido trial indoor completamente falto de dinamismo y entretenimiento. En algunas zonas había hasta 7 u 8 pasos obligados en un caos de flechas de colores, cuando todo buen organizador sabe que en una zona no debería haber nunca más de unos 5 pasos en cada categoría. Si a esto le unimos que el grupo de las zonas 3 a 7 estaban todas juntas a pesar de la larga interzona, el resultado era como es lógico, la formación de largas y pesadas colas que acababan con la paciencia de muchos, pues avanzaban muy lentamente. Pero para colmo el peor error de la organización era otro más, el tiempo concedido de 4 horas para realizar las 8 zonas y tres vueltas, era clarísimamente insuficiente, aún para el caso en que las zonas hubiesen sido mucho más dinámicas.
Con un recorrido tan largo y además parte de la interzona de doble sentido, dar 4 horas de tiempo no era lógico de ninguna manera, y además suponía un grave peligro, con pilotos y niños circulando por el recorrido de doble sentido por estrechos caminos a toda velocidad. Esto sin duda colmó la paciencia de muchos. El resultado es que hubo numerosas penalizaciones de tiempo, muchos pilotos excluídos por no llegar y otros muchos que prefirieron retirarse. Los comentarios eran de queja y descontento tras el trial, sin comprender como se pueden cometer tantos errores por parte de quienes se supone que saben algo de trial, y más teniendo en cuenta que ya en el trial de Cabanillas del año pasado hubo bastantes quejas por el marcaje de las zonas. Además algunos pilotos tuvieron otro problema añadido, quedarse sin gasolina en el recorrido. Se agradece largos recorrids como los de este trial, pero como esto hace mucho que no es habitual, no todos se llevaron combustible para repostar o simplemente no lo hicieron al no pensar que fuese necesario o quizás por no perder tiempo. Si el recorrido con 3 vueltas no iba a llegar para hacerlo sin repostar al menos se debería haber avisado a los participantes. Pero el problema se agravó porque la zona de aparcamiento quedaba a un lado del pueblo, alejado del recorrido, por lo que para repostar había que recorrerse todo el pueblo por la calle principal y sin apenas tener tiempo para terminar el trial, una locura y un fallo más. Pero no termina la lista de errores aquí, ya que lo sucedido con los niños fue aún más triste, digno de quitarle la ilusión a cualquiera. Ya ha quedado demostrado que el trial infantil no importaba nada a la FMM este año, que se ha cargado las categrías Infantil B y C y que no ha querido atender a las demandas de los padres, limitándose a exponerles el plan ya establecido, les guste o no. Al final se cedió un poco y la FMM tomaba la decisión de dejar a los niños correr en triales de adultos, los B en zonas amarillas y los C por zona libre, realizando dos pasadas por zona y pudiendo elegir hacerlas seguidas a una sola vuelta. Las zonas amarillas resultaron muy difíciles para la mayoría, y para los niños no digamos...
Pero lo de las zonas libres ya fue lamentable, pues todos los padres al final coincidían en que al marcarlas no se había tenido en cuenta a los chavales lo más mínimo o bien quien marcó las zonas no sabe como debe ser el trial infantil. Aquí no acaba todo, ya que el recorrido de la interzona entre las zonas 7 y 8 era un auténtico infierno para los chavales, que en muchos casos tenían quebajarse de la moto y ser ayudados. Al final todos decepcionados, justo lo que necesitamos en este deporte, como si sobrase gente... Con esto queda absulutamente demostrado (no hace falta ser muy hábil para saberlo de antemano) que los triales de niños tienen que tener sus propios triales, al menos sus propias zonas, con tres niveles diferentes al menos. Esta es la única manera de fmentar el deporte del trial entre los más pequeños, labor que según la propia ley del deporte es función de la federación.
Como veis este reportaje es muy crítico, como lo eran los comentarios de los piltos en las zonas o después del trial, o como son los comentarios que podéis ver en el foro (apartado zona centro), pero nosotros como medio de comunicación independiente y que lucha por la promoción del trial, nos limitamos a transmitir las opiniones de la gente y lo que fue el sentir general, al igual que en la gran mayoría de reportajes alabamos y agradecemos la labor de los organizadores que hacen bien las cosas. Pero el desastre vivido en Cabanillas no puede sino servir para que las cosas mejoren, y ya se han empezado a dar cuenta en la FMM que es urgente hacer cambios para que todo vuelva a la normalidad. Tras el trial se realizó una encuesta partiendo de la iniciativa privada de Motos Alfa con el objeto de sacar conclusiones y transmitirlas a la FMM para que mejore la situación, y esta aceptó sus errores y se comprometió a tratar de hacer todo lo posible para que en el próximo trial las cosas salgan mucho mejor y la gente vuelva a casa satisfecha. Así que no os desaniméis ninguno, y aunque bastante daño ya se ha echo últimamente (como refleja la cifra de inscripción mediocre) esperemos que no se tarde en reaccionar y los triales que organice la FMM así como los asuntos que de ella dependa mejoren ostensiblemente. Repaso a cada categoría Dando un breve repaso a lo sucedido en cada una de las categorías y comenzando por A, de los 7 inscritos sólo pudieron terminar dos y hubo cinco retirados o excluídos por tiempo, de entre ellos algunos con clara opción a victoria como el de Sherco-Alfa Marcos Méndez. Javi Cordero era el vencedor con 57 puntos, 9 de ellos por tiempo y Nacho Fernández Sancho era segundo con 60, 13 de ellos por tiempo, con lo cual este influyó en el resultado. El piloto que menos tardó lo hizo en 4 horas y 39 minutos y el que más (de los que llegaron) en 5 horas y 15 minutos, con lo cual queda claro que 4 horas y media era un tiempo completamente insuficiente. Al haber sólo dos clasificados la prueba no es válida para el campeonato. Las puntuaciones también dan muestra de que el nivel fue excesivo.
En el nivel B se presentaron 13 pilotos, lo cual no estaba mal tras el creciente fracaso de la categoría en las últimas temporadas a causa del constante endurecimiento de las zonas. Esta cifra podría hacer pensar que la categoría se podría recuperar aunque muchos de los azules de siempre ahora están en verdes, dos de ellos acaban de pasar este año y algunos de los que probaron suerte esta vez en azul probablemente desistan de su intención en las próximas pruebas. Excluídos por tiempo sólo hubo dos, pero tdos menos uno acumularon penalizaciones de tiempo de entre 4 y 58 minutos. El campeón 2011, Jesús Martín, se llevaba la victoria con nada menos que 51 puntos, 6 de tiempo, seguido de Roberto Bautista y David Quer empatados a 82 pero con 9 de tiempo para Roberto. Muy cerca del podio se quedaban Alberto Moreno y Adrián Saavedra. Jesús hizo tres ceros en todo el trial, el segundo 2, el tercero 1. Los demás casi todo treses y cincos... Este no es el camino y llevamos diciéndolo ya varios años... quedando cada vez más demostrado.
En el nivel C hubo 22 pilotos, de ellos 6 bajados desde azul en un plazo de tres años hacia aquí. 14 excluídos o retirados y sólo 8 clasificados. De los retirados la mayoría porque no quisieron terminar y se fueron sin comprender como se habían marcado esas zonas. De los 22 pilotos sólo 4 llegaron en tiempo, el resto con penalizaciones entre 6 y 31 minutos. El
retornado José García Golles se llevaba la victoria con 27 puntos,
y a pesar de todo no se mostraba satisfecho con este trial. Segundo era Bertrán
Martínez Peñalver con 31 y tercero Diego Ignacio Olave con 39. Cuarto
y quinto eran José Miguel Herrero y Luis Arocas empatados a 55 puntos. En Nivel D amarillo, de los 28 participantes hubo 16 retirados o excluídos, concretamente 2 excluídos y 14 retirados lo que demuestra el nivel de satisfacción que se llevaron con este trial... En tiempo llegaron sólamente 10. La victoria se la llevaba Juan Iruela con 22 puntos, segundo era Adolfo Barreiro con 28 y tercero Paco Callejo con 30 sobre su Merlin clásica, que volvía a los triales tras un año en blanco a causa de un accidente con la mto de carretera cuando un coche le atropellaba rompiéndole una pierna. Nos alegramos de la vuelta de uno de los más veteranos pilotos de la zona centro. El resto de pilotos rondaban o superaban ampliamente los 50 puntos, algo no muy adecuado para la categoría base y en la que entran los que se inician. Hay la posibilidad de que se cree una nueva categoría blanca, más sencilla que la amarilla y apta para todos los que quieran disfrutar de un trial muy fácil y de iniciación, algo que ya no es factible ni en amarillo. En Infantil B sólo se presentaron 4 pilotos, siendo la victoria para la valiente Eva Muñoz con 53 puntos en las dos vueltas, seguida de Pablo García Fernández con 56 y Javier García Pérez con 57, mientras Alejandro Esteban se retiraba. A la vista de las puntuacinoes y las zonas, queda clarísimo que este no es el tipo de trial que sirve para promocinar este deporte entre los niños y menos el tipo de zonas que necesitan.
Por lo tanto un inicio revuelto de temporada, que esperamos se sepa rectificar a tiempo. Estamos seguros de que las cosas mejorarán, pero después la situación es delicada en el trial de modernas, con sólo un Moto Club madrileño queriendo organizar pruebas (el Valdemanco) y el resto disconformes con la FMM, que al final tiene que organizar el resto de pruebas para que no desaparezca el campeonato. Es hora de cambiar muchas cosas, volver a motivar a los clubes y acceder a sus necesidades y motivar también a los pilotos para que se sigan sacando las licencias. Y por supuesto organizar triales que gusten a los aficionados, con zonas de nivel adecuado a cada categoría, con un marcaje bonito y natural, sin pasos ratoneros, y con un tiempo que sea suficiente para disfrutar del trial sin tener que andar con prisas o con empujones en las colas. La próxima cita será en Valdemanco el 11 de marzo, organizada por el veterano MC Valdemanco lo que seguro significa una garantía de buen trial, si se lo permiten, así que no os lo perdáis. Galería de fotos:
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