Nachette reivindica una vez más el derecho a practicar nuestro deporte y a tener una regulación justa y lógica. Los argumentos vuelven a ser convincentes. Lograrlo es difícil, pero no imposible.
Nachette reivindica una vez más el derecho a practicar nuestro deporte y a tener una regulación justa y lógica. Los argumentos vuelven a ser convincentes. Lograrlo es difícil, pero no imposible.