Trial de Becerril de la Sierra

Hola. Sigo lesionado y no puedo ni montar ni clavar estacas, así que la narración que sigue es un género nuevo para mi. Perdón por las inexactitudes y los juicios de valor.
Ayer domingo dia 3 de Abril se celebró el Trial de Becerril organizado por Emedoce.
La participación fue de 71 pilotos. Lo cual me parece alentador, ya que continúa con la tendencia de este año.
Hubo, sin embargo, gente a la que eché en falta y, en cambio algunas caras que no conocía. A algunos los había visto en Facebook y verlos en vivo y en directo me agradó sobremanera. Aunque hubo un «personaje» que me alucinó del todo…luego hablo de ella.
La salida de la prueba la dimos puntualmente a las 9:30 Julito y yo. Lo primero que llamó la atención es que ¡había pilotos que no estaban en su hora! Pero ¿como es posible? La mayoría deseando salir y varios missing.
Aquí la primera anécdota: evidentemente si te dan la salida es que tienes dorsal y moto. Pero un piloto se presentó pidiendo su tarjeta sin ninguna «pertenencia». Al objetarle Julito que no se lo podía dar, el piloto contestó que el peto lo tenía en la mano, pero que la moto la tenía desmontada. No quiero decir nombres pero ¡¡Horacio Sanmartin, alias Yoyi, hay que madrugar más y traer los deberes hechos!! :lol: Es coña, el sabe que le tengo aprecio y además hizo un muy buen papel con su Fantic.
Cuando faltaban pocos pilotos para salir, el director de carrera (Fernando) y yo nos dirigimos a las zonas a ver si estaban habiendo problemas: interzona mal marcada, cintas rotas, colas en las zonas, etc. La verdad es que se me antoja un milagro que no hubiera demasiadas colas en un sitio tan reducido como Becerril. Solamente en la zona juzgada por Ramón vimos algo de atasco. Era de una longitud normal, pero había un arbol tan frondoso que obligaba al amigo Vitaminas a perseguir al piloto casi en todo su recorrido, lo cual ralentizaba su labor. Un poquito de ayuda y resuelto.
El resto bien. Un par de estacas sueltas, una flecha machacada, una ligera discusión sobre si un piloto inspeccionando la zona no se retiraba cuando el juez anunciaba ¡Zona!, menudencias, afortunadamente.
La lluvia llegó con puntualidad, incrementando un poquito la dificultad de las secciones. Nada alarmante, por otro lado.
Me pilló en las zonas aledañas al río y fue allí donde más disfruté del dia. Fue en la zona 7 donde vi a Cloe: una niña rubita, de ojos claros, que no levantaba mas de un metro y poco del suelo y que con su motillo eléctrica se enfrentó a la zona con toda la determinación que su escaso conocimiento del peligro le otorgaba. Entró siguiendo a su minder, giró a la derecha, una pequeña subida de tierra y casi arriba, se fue al suelo sobre la parte izquierda del manillar. ¡Arriba, sigue! Le gritaba animandola el mochilero y la niña arriba y a seguir ¡gas, mucho gas, a tope! La indicaba el minder para encarar una rampa de piedra que, para su estatura, era importante. Pues allá que va Cloe, retorciendo el puño de gas (o de voltios, en este caso) y subiéndose como una campeona la rampa ¡en caballito!. ¡Joder que momento! La juez, el mochilero, los pilotos, todo el mundo aplaudiendola a rabiar y ella, mirando y seguro que diciendose «¡esto mola!».
Gracias a los Rodríguez, Rodríguez (no, no es una repetición innecesaria), Zulueta, Estefanel, Bonilla y tantos otros, seguiremos hablando de pilotos madrileños de Trial, afortunadamente.
Y poco mas que relatar. Que espero que algunos, esperando al reportaje que haga TodoTrial, pongais alguna impresión y alguna foto. Yo sólo voy a poner dos:
Esta de Marino Galilea representando a los veteranos a los que es un gusto ver como van y como se esfuerzan.

Y otra de Guillermo Rodríguez en representación de los jóvenes que vienen (afortunadamente) empujando fuerte.

Saludos y triales