Los campeonatos navarro, navarro-riojano y vasco de esta bonita especialidad volvieron a la palestra con la décimo octava edición consecutiva del trial de Muniáin de la Solana, una vez más organizado principalmente por el incansable Chuma Vicuña junto con el Moto Club Kabras.
Haciendo las cosas cada vez mejor
El mes de agosto, con sus vacaciones y su calor, ya se quedó atrás, muy olvidado. Pero el trial en esta parte del norte de España ha seguido su marcha prevista, y así, tras unos dos días de trial magníficos en Cornago (La Rioja), los campeonatos navarro, navarro-riojano y vasco de esta bonita especialidad volvieron a la palestra con la décimo octava edición consecutiva del trial de Muniáin de la Solana, patria chica del gran Chuma Vicuña, quien, una vez más, con el apoyo y esfuerzo del moto club Kabras, ha sido otra vez el alma de esta nueva prueba.
El pasado domingo 23 de septiembre salió un día totalmente soleado y bastante caluroso. Esto supuso un esfuerzo extra para los 53 participantes que tomaron la salida, a las nueve y media del domingo, para cubrir sobre una sencilla interzona de tres kilómetros siete zonas a triple vuelta, con un tiempo concedido de cuatro horas y media. Este resultó muy amplio, pues ningún piloto penalizó por tiempo, y las escasas colas que se formaron fueron muy bien toleradas.
Este trial – el último de los cuatro previstos para este año organizados por el Kabras – ha supuesto, nuevamente, la puesta en práctica de la decisión del club de rebajar la dificultad de las dos categorías superiores y, a su vez, aumentar ligeramente la de las dos inferiores, buscando siempre, por supuesto, la ausencia del riesgo irracional. Una zona puede ser fácil o muy difícil, pero siempre debe ser pensada para que no haya riesgo inútil. Esto es algo que el Kabras tiene como norma para el presente y para el futuro. Y, por eso, los participantes así lo han reconocido y manifestado a la organización.
Y si a eso añadimos que el ambiente en estos triales es magnífico y que, ayer, además de una comida multitudinaria, se repartieron diversos obsequios aportados por Bardahl y las tiendas de Pamplona Txarandaka y SixDays, pues la cosa resultó muy bien. Las zonas eran más bien largas y resultaron ser selectivas; el terreno estaba muy seco, por lo que el agarre estaba comprometido en bastantes sitios. Hubo de todo: giros en cuesta, escalones de roca y de tierra, regatas, rampas, piedra suelta en abundancia… Las puntuaciones resultaron muy igualadas. Y hubo mucho calor también. Comentemos las categorías.
TR1: ¡Miguel Ángel Jiménez penalizó algo!
En esta categoría hubo tan solo tres participantes: el habitual vencedor y dios local del trial Miguel Ángel Jiménez y los dos mortales Miguel Ángel Bermejo y el local Rubén Ortega. Hubo ausencias notables, pues se esperaba que, por lo menos acudiesen tres o cuatro más. Pero no ha sido así. Hubo que lamentar en particular la del presidente del Kabras, Dani Gárriz, por lesión en una rodilla en Cornago. Le deseamos una rápida recuperación.
Y si lo normal hasta ahora ha sido que Miguel Ángel Rodríguez acabe sus triales sin penalización, en esta ocasión se ha ido con seis puntos. Un pie suelto por ahí en la segunda vuelta y un cinco en la tercera al habérsele calado la moto en una ocasión fueron la causa. Pero, como es habitual en él, el resto de su actuación en Muniáin fue digna de admiración.
Tras este monstruo pelearon Bermejo y Ortega. En la primera vuelta Rubén Ortega consiguió tres puntos menos que Bermejo, pero el calor hizo mella en él y se desfondó. Miguel Ángel Bermejo lo llevó mucho mejor y al final se impuso muy claramente sobre él.
TR2: Los chicos del Mediser, al podio
Once pilotos tomaron la salida en esta categoría. Varios eran candidatos a subir al podio; pero destacaron dos muy claramente: David Escribano, finalmente el ganador, y Andoni Pérez Martín. David está arrasando este año en esta categoría, pero Andoni está progresando simultáneamente a toda velocidad, por lo que no será de extrañar que su primera victoria llegue muy pronto. David fue muy regular durante las tres vueltas, pues penalizó tres puntos únicamente en cada una de ellas (nueve puntos al final, pues). Pero Andoni, que tuvo una primera vuelta espantosa, con dos fiascos consecutivos, espabiló, y así fue capaz de penalizar únicamente un punto en la segunda y tercera vuelta por dos pies sueltos en la misma zona (la cinco). Bravo por él. Su estilo es muy potente y tiene grandes destellos de calidad, así que estamos seguros de que muy pronto será un rival mucho más duro.
En tercer lugar quedó su compañero del equipo Mediser Borja Apellániz, hoy no tan fino como en otras ocasiones. De todos modos estos tres eclipsaron a la restante concurrencia.
Tras ellos se clasificaron Íñigo Lázaro, el local Tapi Armañanzas, etc. Cabe destacar al jovencísimo Marcos Bermejo, hijo del TR1 Miguel Ángel, quien pinchó a media carrera, y que es otro nombre que despuntará en muy poco tiempo.
TR3: Aitor Legarda fue el mejor
Esta categoría lleva tiempo estando muy animada (aunque no es la única), pues en varias ocasiones es la que registra el mayor número de participantes y es, en consecuencia, la más disputada. Hoy ha sido superada por los amarillos en esto, pero lo comentamos más abajo.
La hazaña en esta categoría consistió en hacer una vuelta penalizando dos o tres puntos nada más. Esto lo hicieron únicamente tres pilotos, siendo Aitor el que, además de conseguirla, fue el que menos pies puso a lo largo de la mañana. Con tan solo siete puntos (3+2+2=7) se subió al puesto más alto del podio; detrás hubo una batalla muy interesante entre Ernesto Jiménez Cacho (7+4+2=13), Diego Pérez Nicolás (3+5+6=14) y Mario Santolaya (7+5+3=15). Estos tres pilotos son los tres primeros clasificados en el campeonato, siendo Mario el que más triales ha ganado. Pero en esta ocasión Mario se ha tenido que conformar con el cuarto puesto por tan exigua diferencia, aunque su liderato en el campeonato sigue ahí muy sólido.
Tras estos cuatro quedaron Mikel Lertxundi (a quien le vimos unos detalles de gran calidad) y Francisco Javier Aldecoa, quien todavía tenía en la cabeza las sensaciones de pilotar recientemente una clásica y estaba por tanto un poco despistado con las reacciones de su moderna TRSS. Y así hasta trece clasificados.
TR4: Antolín otra vez (y van…)
Tanto TR3 como TR4 están resultando, como hemos mencionado arriba, las categorías más animadas, concurridas y entretenidas. En TR4 se juntan los grandes veteranos y los jóvenes que empiezan y que pronto subirán a las superiores. En esta ocasión fue la más numerosa, pues salieron diecisiete pilotos. Entre ellos figuraban a la victoria los tres que están dominando en el campeonato: el joven Jorge Apellániz, el veteranísimo Luis Castellanos y la revelación de este año José María San Miguel.
Pero, ay, amigo, a veces se deja caer por aquí el palentino Antolín y entonces el condenado se lleva a todas las chicas. Y Muniáin no ha sido una excepción. Antolín hizo una primera vuelta desastrosa (11 puntos), pero reaccionó y fue capaz de realizar la segunda y la tercera sin poner ningún pie, por lo que claramente ganó en esta categoría. Por detrás pelearon hasta cinco pilotos más. A priori podía ser Jorge Apellániz el siguiente en el podio, pues Jorge es el que está liderando el campeonato (Antolín no puntúa) en dura lucha con Luis Castellanos.
Pero fue José María San Miguel el que se llevó el gato al agua en esta ocasión, ganándole a Jorge por dos puntos. Si se mira la clasificación se ve que las puntuaciones han sido muy parecidas, incluso con empates.
Y es que los pilotos de TR4 tienen en cuenta que, con esta participación y este nivel de dificultad, un pie de más puede ser muy importante.
Debemos destacar algunas cosas; por ejemplo, la mala suerte de Iker Gavilán, quien tuvo un pequeño accidente en la interzona, que no le causó daños físicos pero que le obligó a retirarse, siendo el único abandono en el día de hoy. También, que Daniel Ramírez de Arellano, un joven muy fino capaz de ganar triales (como ya lo hizo en Torrecilla en Cameros), se lesionó el pecho en una zona al realizar un esfuerzo, lo cual le produjo dolores cada vez más molestos durante todo el trial.
Clásicas: Roberto Mendívil y Alberto Zárate, los mejores por amarillos
Únicamente dos participantes en esta categoría. La organización les dejó, como es lógico, que escogiesen por qué color querían competir. Y escogieron amarillos. Y así, ambos amigos hicieron el trial juntos, marcándose zona a zona.
Cabe hacer aquí un par de comentarios. En primer lugar, es interesante mirar las tarjetas de puntuación de todos los que han ido por un mismo color y así establecer comparaciones. Así, vemos que tanto Roberto (5 puntos) como Alberto (9) han sido los mejores hoy por este color. Alberto, en particular, hizo a cero la tercera vuelta (¡Antolín, no has sido el único!).
De acuerdo en que ambos son pilotos de TR3 – que es el color por el que habitualmente corren las clásicas en esta zona -, pero el mérito de Alberto Zárate es haberlo hecho con una Sherpa azul que parecía estreñida. Sonaba muy ahogada, como si no respirase; como si no pudiese coger vueltas. Así que tiene su mérito.
Juveniles: Iosu Pérez Martín muy destacado
En esta categoría había tan solo dos pilotos: Iosu Pérez Martín (hermano pequeño del TR2 Andoni) y Aimar Albisua. Ambos fueron por amarillos. Aimar es muy joven y hace los triales acompañado por su padre Gaizka. A Aimar se le nota el progreso año a año. Hoy ha sido claramente batido por Iosu, quien está progresando también muy deprisa. Iosu está haciendo cosas muy buenas y está demostrando que será un buen piloto en cuanto crezca. Ánimo a los dos.
Infantiles: los peques progresan, Andrea fue la mejor
Tres chavales y dos chavalas se juntaron este domingo. La organización había preparado para ellos cinco zonas aparte. A petición de los padres, el nivel de dificultad de estas zonas especiales está aumentando paulatinamente, pues los peques están aprendiendo muy rápidamente y, en consecuencia, quieren zonas más complicadas, pero, eso sí, sin ningún riesgo. Y así se hizo.
Pero el padre de uno de ellos, Íñigo Andrés Iriarte, decidió que su hijo fuese como unTR4, por lo que realizó el trial como un amarillo más. La verdad es que las zonas de TR4 resultaron demasiado difíciles para él y su pequeña GasGas, pero Íñigo le echó mucho valor y coraje, así que le felicitamos por ello.
Los otros cuatro, pues, compitieron entre sí en las zonas especiales. La mejor puntuación de todos ellos fue la de Andrea Sáez del Burgo (¡qué gran estilo!), quien ganó por dos puntos a Haitz Lertxundi, hijo del TR3 Mikel. Más atrás Iosu Echeverría y Elena Arcas. Nuestra enhorabuena a estos chicos y chicas por su afición y a sus padres por la ayuda que prestan a la organización.
Bueno, pues ahora toca divertirse en San Adrián el próximo domingo 7 de octubre con nuestros amigos de La Rioja Carmelo Gutiérrez, Rodolfo y Virginia Valdecantos y demás ayudantes. No faltéis.