Harry Lindsay, importador de Bultaco en Irlanda y reconocido piloto motociclista, falleció en la mañana del 11 de noviembre de 2018 a la edad de 92 años.
El pasado domingo por la mañana falleció Harry Lindsay a la edad de 92 años, conocido en el mundo del motociclismo por ser importador de motocicletas además de motociclista, siendo la tercera generación de su familia en desempeñar estas labores.
El abuelo de Harry, Robert Lindsay, fabricaba motocicletas en 1898 y producía la «Celtic». Robert Lindsay jugó un papel fundamental en el desarrollo del neumático junto con su amigo John Boyd Dunlop, quien le convenció para montar la primera fábrica de neumáticos del mundo en Golden lane, a sólo 50 metros del negocio de Lindsay.
De hecho los primeros prototipos de neumáticos Dunlop fueron probados en las bicicletas de carreras de Robert ganando muchas competiciones.
La tienda de los Lindsay estaba en Ship Street, Dublín, de ella se haría cargo primero el abuelo de Harry, Robert, y después su padre, James. Lindsay fue uno de los negocios más antiguos de motocicletas de las islas británicas, ya que fue fundado en 1897, primero ensamblando bicicletas y llantas de acero.
Harry Lindsay fue el importador oficial de Bultaco para Irlanda, y además tenía un estrecho trato con la familia Bulto de Barcelona. También importó la marca «Super Ser» de calentadores de gas fabricados por la compañía de Sant Adrià de Besós.
Harry, como su abuelo, sentía pasión por este mundo, se volcaba en cada proyecto. Fue un generoso patrocinador de muchos corredores que recibieron su apoyo a lo largo de muchos años. Sus hijos Alan y Ralph fueron también pilotos de trial y el no dejó de montar hasta pasados los 80 años.
Su relación continua con la marca Bultaco lo llevó a ingresar en el equipo de Bultaco en el Tourist Trophy de 1967 en la categoría de motos de serie de 250cc, junto con los corredores Bill Smith y el también irlandés Tommy Robb, finalizando en los dos primeros puestos. Harry también fue el agente de Irlanda para las motocicletas Vincent y, como tal, fue uno de los pocos afortunados en montar en la famosa Vincent Black Lightning Supercharged de Reg Dearden.
Información proporcionada por Trials Gurú.
