El Trial Gran Canaria llegó a su novena edición en Santa Brígida de la mano del Moto Club Las Palmas Roque Nublo y dando homenaje a Alberto Santana Cruz con su Trofeo de Honor, además en esta edición a Javier Cabrera, que no quiso perderse tan especial jornada.
Texto y fotos: Feli Santana.
Si alguna modalidad del deporte del motociclismo canario puede estar de enhorabuena, sin duda es el trial. Por belleza estética, por competitividad, por escenarios, por fortaleza histórica y por compromiso de moto clubes. Mucha de estas culpas las tiene el compromiso adquirido por las administraciones municipales y deportivas. La apuesta seria por la gente que trabaja para el deporte, aunque en ello les lleve el sacrificio y la apuesta por la consolidación.
El noveno trial Gran Canaria, será recordado por el nivel de exhibición de un trial de leyenda, un trial de interzonas, duro y sin contemplaciones. Un trial al que hay que llegar con la mentalidad de medir su filosofía y luchar contra sus elementos, son muchos, los que han probado el sabor agridulce del éxito y el fracaso en la competición de Santa Brígida, y a todos les une el mismo slogan de opinión. El trial del Gamonal, está por encima de la cultura trialera de canarias.
Las duras interzonas en un terreno rural, de barrancos y montañas, de recovecos apenas marcados por la huella de las ruedas de las trialeras que mantienen su territorio de prácticas a salvo de las críticas de los salvadores del medio ambiente. Y es que una moto de trial, solo deja huellas de 10 centímetros de ancho, sobre el terreno barroso y mantiene a raya la vegetación y limpio las sendas. Este fenómeno de mantenimiento sucede en este lugar de medianías con naturalidad, la moto de trial forma parte del paisaje rural.
Pero vayamos a la competición, para descubrir los sabores de los implicados en el encuentro anual, que concluye el Moto club Las Palmas Roque Nublo con notable acierto. El Memorial Alberto Santana Cruz, volvió a dejar constancia de su enorme carisma deportivo y su recordado carácter de dureza y competición, triunfar en la catedral equivale a entrar en ese olimpo de los dioses trialeros de nivel canario.
Ante la incertidumbre del aumento de precio en las inscripciones y la aceptación del trabajo de los pasionales por sacar adelante la competición, primó el sentido común de las mayorías, y poco a poco se fueron involucrando a sacar licencias federativas y a participar de la gran fiesta del trial. Evidentemente la apuesta fue seria, como la labor de los involucrados en la organización. Federaciones, ayuntamiento y clubes.
Y arranco la mañana, más seca y primaveral que la última edición. Un campo inmensamente verde de trebolinas y amarillo de flores acompañó el sufrimiento de los veinte héroes que tomaron la salida, a las 9.00 h. La primera sorpresa y alegría fue la de ver la evolución espectacular de Arami Estupiñan, el único niño que decidió participar con un notabilísimo acierto de sus padres, ganando su categoría a falta de rivales pero con una gran proyección deportiva y entrenamiento, tenemos cantera asegurada.
En la categoría TR4, era Carlos Trujillo quien decidía bajar el escalón del esfuerzo, quizás para no abandonar su pasión por la competición y acompañar el gran equipo deportivo que tiene afiliado a su marca. En segunda posición llegaba José Tomás, el héroe de la jornada entre sufrimiento y cara de alegría por el cumplimiento un año más en la catedral. Recuerdos al bueno de David Cabrera, que abandonaba con zapatos nuevos y una actitud caballerosa siempre con todos, el cuarto en discordia abandonaba también, el bueno de Abían Ramirez en su primer trial oficial, con el sueño de haber hecho grande su participación en un trial de bandera.
En la categoría TR3, sorpresa y valentía de Daniel Batista que se marcó un trial con plenitud y confianza en su apuesta, la de Miguel Estévez que pulió como apuesta un trial duro y una medida acertada de ir a contrarreloj a por la competición. Cerraba Jose Luís Montesdeoca en tercera posición algo más desafortunado que en la pasada carrera. -En Gamonal aunque el recorrido sea igual, nunca habrá dos triales iguales-
Mención especial para Pepe Moreno que cincuenta y tres años después sigue dejando firme a los chavales. Que grande este muchacho, un señor del trial rotundo. Le seguía Eduardo Batista, algo más flojillo, el estreno de Juan José Díaz y lástima del abandono de otro grande de la historia del trial, el gran Coke Gómez, que rompía su montura y cedía su ilusión.
En TR2, el intocable Iván Santana dejaba clara su parcela acotada por estilo y clase histórica, en la que no ha perdido ni un ápice de su habilidad. Samuel se aupaba con buen nivel de entrenamiento a la segunda posición ante un contrariado Yuri Ballesio que hacía un trial genial, pero que el tiempo no le fue aliado a su nivel y forma. Gustavo Perez Pimienta siempre activo y competitivo era seguido por Jorge León que cerraba ex -ecuo con el mismo número de puntos.
La categoría reina, era dueña de tres malabaristas cuyo nivel está un paso por encima del resto. El bueno de Jony Naranjo, con notable falta de entrenamiento, mantiene el tipo después de una larga lesión cuestión que le honra a su nivel deportivo. En segunda posición un afinadísimo Iban Salazar sacaba un trial meritorio de concentración y apuesta y en la categoría absoluta un primer puesto del cajón intocable el de Cristian Naranjo, que mantiene su arte y esencia de humildad trialera y deportiva.
Un trial de grandes emociones y mejores sensaciones, para unos desastroso, para otros afortunado y es que en el Gamonal el trial supera las expectativas de cada uno, las interzonas son asignaturas pendientes de la gran mayoría de trialeros, que quieren pero que les supera el tiempo y las condiciones de los elementos.
El homenaje cercano de sus amigos al gran Javier Cabrera, que hizo acto de presencia con el reconocimiento de la afición a su historial deportivo fue un acierto agradecido y constante en el Memorial de Albertito.
El Memorial Alberto Santana Cruz, Trofeo de honor para el trial canario, grabará dos nombres más, a su base. El estreno de dos grandes, uno por consolidación Cristian Naranjo, que ya se lo merecía y uno de promesa, la de Arami Estupiñan que cuando sea mayor, verá el regocijo de sentirse tocado por la bondad de su juventud y nobleza deportiva en un trofeo de leyenda.
A la entrega de premios acudía la plana mayor municipal y federativa, Vicente Gonzalez presidente de la Federación Canaria de Motociclismo, que se ha quedado enamorado del trial Memorial de Albertito. D. Armando Umpierrez concejal involucrado y comprometido con el trial en su municipio de Santa Brígida al que deseamos mucha suerte por su valía personal. Marco Herrera presidente de la Federación de Gran Canaria de Motociclismo, todo empuje e involucración con su nueva tesis administrativa e institucional y el nuevo sponsor para la modalidad Carlos Romero -Romero & De la Torre. Asesores de seguros- con una apuesta agradecida al deporte de la moto de trial de Canarias.
Deseamos que el futuro siga alimentando la leyenda de esta cita.