La Feria Valencia Motor Classic llegó en su edición 2022 junto al Salón del Autómovil de Valencia y el Motor Show, superando en conjunto los 45.000 asistentes, lo que supone un 10% más respecto del pasado año.
Los aficionados al motor clásico y el coleccionismo disfrutaron a lo grande de la segunda edición de la Valencia Motor Classic, que se celebró del 2 al 4 de diciembre, junto a la Feria del Automóvil de Valencia, cuya altísima oferta así como el amplio programa de actividades supusieron un aliciente para la visita al salón valenciano, que este año se ha convertido en la cita de la automoción de más envergadura que se ha celebrado en nuestro país.
El salón clásico mostró curiosidades como el Seat Toledo Podium de la colección «Seat en Rodaje» y que se entregó a los medallistas olímpicos de Barcelona’92; la colección privada de Jorge Martínez ‘Aspar’, así como vehículos históricos de principios de siglo y una interesante muestra de motos clásicas de motocross y trial.
Así, los visitantes pudieron ver auténticas joyas de colección procedentes de colecciones privadas y de clubes como los de Citroën o Seat, destacando piezas como un Ford T de 1928, un Austin de 1959 o un Mercedes Benz 500K de 1936, de la colección de Desguaces Mackintosh.
También causó sensación entre los visitantes la exposición ‘+ Que Clásicos’, que incluía vehículos de época fabricados desde el año 1920 hasta la década de los 70 y que acoge a piezas tan deseables como Ferrari, Porsche, Austin Healey, Jaguar, Oldsmobile o Lotus.
También hubo exposiciones tan curiosas como una muestra de vehículos utilizados para rodajes de cine y series de televisión, una muestra temática en torno a Jaguar o una retrospectiva sobre el mítico Ford Fiesta, el primer coche producido en la planta valenciana de Almussafes y del que recientemente la marca del óvalo anunció su cese de fabricación.
Los vehículos de dos ruedas también tuvieron algo de protagonismo en el salón València Motor Classic, con la presencia de algunas motos de la colección de Jorge Martínez ‘Aspar’, o la primera motocicleta del campeón valenciano Ricardo Tormo.
Pero sin duda uno de los puntos que más interesó a los aficionados trialeros, fue la muestra de la colección de motos históricas de cross y trial, pertenecientes a dos coleccionistas valencianos, Julio Galindo y el habitual en la Copa de España de Trial de Clásicas y los triales valencianos, Emilio Palencia. Entre las trialeras pudimos ver motos como la británica BSA B40 pre 65, la Bultaco Sherpa Kit modelo 92 de 1973, la Ossa Mick Andrews Replica preparada para competir en los triales de clásicas y utilizada habitualmente por Emilio, una Bultaco Sherpa 199A también modificada, o las originales Ossa TR80 250cc naranja o Montesa Cota 25 en su última versión, que fue producida en color blanco.
Entre las motos de motocross clásicas se exhibían una interesante Derbi prototipo preserie CR79, otra Derbi 74cc de 1978, una Puch Cobra M82C de 1982, así como algunas más modernas de los años 80, KTM, Kawasak y Honda.
Además, la feria recibió la visita del andorrano Albert Llovera, que en 2023 volverá a participar en el Rally Dakar superando una vez más las dificultades de su inmovilidad, o del prestigioso periodista del mundo del automóvil, Máximo Sant, que ofreció una conferencia durante el Salón del Automóvil, el cual, a diferencia del Motor Classic, permanecería abierto hasta el martes 6 de diciembre, y que finalizo con gran éxito en cuanto a visitantes y a unidades vendidas.
Galería de fotos Féria Automóvil Valencia y Valencia Motor Classic:
