Junto con sus amigos David Martínez, José María Dominguez y Julián de Cabo, con el apadrinamiento del gran «Mick Andrews» crearon el Vino Tinto Team, y durante una temporada establecieron como costumbre el montaje de una carpa en la que al terminar cada trial de clásicas se iniciaba un magnífico picoteo post trial en el que no podían faltar la cerveza, el vino tinto y el jamón serrano, estando invitados todos los que quisiesen. El objetivo era tan loable como sencillo: que lo más importante de un trial no fuese la competitividad sino el buen ambiente, la camaradería y las risas entre compañeros.
Sin embargo estas nobles intenciones no calaron en la medida en que Manolo quería, la competitividad ganó la partida, con lo que el VTT (Vino Tinto Team) decidió abandonar los triales definitivamente sin haber logrado generalizar el ambiente que pretendían. A pesar de todo Manolo seguía acudiendo a rutas, quedadas y jornadas de diversión y motos con sus amigos, gracias a los cuales pudo superar los difíciles momentos ante la enfermedad y posterior fallecimiento de su mujer.
Ahora que llevaba unos años con todo superado, disfrutando de un nuevo amor y de su gran afición por las motos, nos ha dejado sin avisar. Nuestro pésame a sus familiares y amigos, ráfagas al cielo desde una clásica de campo en tu honor.