En Cabrianes se superaron una vez más todas las expectativas

Una vez más Cabrianes fue la gran fiesta del trial de clásicas. El año pasado se cumplió el décimo aniversario pero este año también hubo celebración, la de record absoluto de inscritos y el gran éxito de una prueba que se ha convertido por derecho propio en una de las referencias del trial de clásicas a nivel mundial.

Decir Dos Días de Cabrianes seguro que trae recuerdos inmejorables a un buen número de aficionados por el trial de clásicas de todo el continente europeo, y es que la tradicional cita que cada octubre tiene lugar en esta pequeña población barcelonesa es la prueba de clásicas más veterana y esperada del calendario nacional y ahora también del calendario europeo. Y es que en esta ocasión muchos fueron los pilotos que llegaron de países como Francia, Italia o Gran Bretaña a los mandos de las más variadas monturas.

El éxito fue rotundo una vez más, y la recompensa llegó en forma de record absoluto de participantes con unos 180 inscritos. Ya a través del sistema de pre-inscripciones por internet que se dispuso en Todotrial se fue viendo que, aunque algo tarde, el número de participantes iba a ser realmente alto. Los últimos días llegó la avalancha y además de los pre-inscritos aparecieron algunos más a última hora que se presentaban el día de la prueba.

El parque cerrado estaba a rebosar

El Triangle Magic con la ayuda del Moto Club Baix Berguedá volvieron a poner el listón aún más alto cuando ya parecía imposible. No nos cansaremos de hablar maravillas de este trial, y es que la organización volvió a ser perfecta y el ambiente que allí se vive cada año merece un once sobre diez. Desde primeras horas del sábado el paddock estaba hasta arriba, los coches no cabían en el recinto de la escuela de Cabrianes y algunos tenían que buscar aparcamiento en las calles de alrrededor. Las carabanas y tiendas de campaña de algunos pilotos británicos y franceses ya tenían el sitio cogido desde el viernes y cualquier apasionado del trial no daba a basto para admirar todo tipo de clásicas, desde las cada vez más numerosas Pre-65, hasta las más novedosas "post clásicas" que hacían su debut por primera vez en un trial de clásicas y como ocasión excepcional.

   Grandes novedades

Sí, esta era una de las principales novedades para esta edición, la incorporación de una categoría para esas motos que no son clásicas por la moderna concepción de sus suspensiones monoamortiguador y sus frenos de disco, pero que siendo refrigeradas por aire tienen ya una cierta edad y podría ser una bonita ocasión verlas rodar de nuevo, aquellas que se fabricaron entre 1986 y 1990.

Mick Andrews o numerosos franceses no fallaron	Cabrianes 2006 batió todos los records de inscripción

Jill Andrews y la señora de Pascal Joudard

Pero la verdad es que la magia del trial de clásicas reside no sólo en la edad de las motos, sino también en el encanto del modo en que se hacía trial antes, el de la vieja escuela, aquel en el que las motos no permitían realizar cambios, super-escalones u otras florituras modernas, y lo que diferenciaba a los mejores era su finura pilotando en zonas non stop, con un impecable tacto de gas y un control de la posición del cuerpo que se retorcía sobre la moto para salvar las situaciones más complicadas.

Seguro que esta es una de las principales ventajas y atractivos del trial de clásicas, que lo hace mucho más accesible a cualquier aficionado. Como me decía Mick Andrews en una entrevista, "antes ibas a un trial y sin haberlo hecho nunca pensabas... que interesante, yo creo que sería capaz de intentarlo, quiero comprar una trialera y probar... Ahora es diferente, un espectador del mundial pensará... es increible lo que son capaces de hacer estos pilotos..."

Está claro que el trial de clásicas va mucho más allá de la mera edad de las motos, pero no vamos a salirnos del tema, el caso es que la iniciativa de crear una categoría para las post-clásicas fue realmente interesante, ya que se podría volver a ver en acción motos realmente bellas que hace mucho tiempo que no se ven en las carreras. Sin embargo la idea no tuvo demasiado éxito y fueron muy pocos los que se animaron.

En el paddock tampoco había ya más sitio...

Más variedad de motos que nunca

No obstante pudimos ver bellezas como la impecable Honda TLR 250 que prácticamente estrenaba Francesc Estrada, la Mecatecno Skywalker de Javier Conde o las también Honda de Javier Arenas, Jordi Gómez o... el protagonista durante la jornada del domingo, ni más ni menos que el campeón mundial Takahisa Fujinami. En total seis post-clásicas divididas en las categorías amarillo y azul.

La otra novedad eran las categorías de mejoradas, también en nivel azul y en nivel amarillo. En ella se pretendían incorporar motos especialmente preparadas, en cuya preparación se supone que se habrían utilizado componentes modernos, como pueden ser carburadores actuales, o incluso estética modernizada. Al final la inscripción en estas categorías dependía de cada uno, ya que no se comprobó ningún componente en las verificaciones.

Para muchos, establecer esta diferenciación es realmente complicado, porque ¿donde está el límite? ¿que se considera mejorado y que no? ¿que tiene que ver el aspecto estético con la mejora de las prestaciones? El caso es que tampoco funcionó demasiado esta novedad, y sólo hubo cuatro inscritos en mejoradas azul y cinco en amarillo, y como era de esperar, muchas motos que no estaban incluidas en estas categorías estaban bastante más mejoradas que aquellas.

Ricardo Pinet era, como siempre, el maestro de ceremonias

Y hablando de colores, en Cabrianes se continúa con la antigüa distinción de categorías, al contrario que en la Copa de España o la Catalana, por lo que la categoría sencilla sería la de pasos verdes, después estarían los amarillos, y por último los azules, desapareciendo los rojos que quedan integrados en azul, como en las últimas ediciones, demostrándose una vez más muy acertado. Lo que sí se adoptaba eran las distintas categorías por edad de la moto, Pre-65, Pre-72, Pre-77, Post 77 y Post-clásicas en el nivel amarillo, Pre-77, Post 77 y Post-clásicas en el azul. Uniendo la categoría única de verdes y las dos de mejoradas resultaba una cantidad de categorías superior a todas las ediciones anteriores.

   Dos días con el mejor ambiente del trial clásico

Con este inmejorable panorama comenzaba la prueba el sábado a las 9 de la mañana, y ante la cantidad de inscritos, la salida se alargaría casi hasta las 11, contando como siempre con Ricardo Pinet y su Esposa Vera como encargados de la mesa de control. Poco antes las inscripciones y verificaciones se habían formalizado en las ventanillas, contando con varias colas segúncategoría para no acumular a los participantes, que recibían su placa portanúmeros y la camiseta de regalo, para después dejar la moto en el parque cerrado tras su verificación técnica. La verdad es que allí ya casi no cabía ni un alfiler...

El excampeón de Catalunya Damiá Picás se encargaba de verificar	El ambiente era inmejorable, como siempre

Fujinami, invitado de lujo, junto a Cirera y Membrives

La climatología volvía a acompañar al igual que en los dos últimos años, con un día soleado y hasta caluroso, incluso demasiado para lo que estaba siendo habitual en el resto de la península, por lo que incluso en manga corta el calor se hizo notar a medida que el sol se levantaba.

Los pilotos tenían su horario de salida perfectamente marcado en el tablón de anuncios, así como la ruta que les correspondía en cada jornada. Y es que una vez más, la masiva participación no fue obstáculo para una perfecta organización en la que se tomaron todas las medidas para evitar las colas. La principal era la ya vista en ediciones anteriores, dos rutas diferentes para las 8 primeras zonas, marcada cada una con un color. Es decir que amarillos realizaban la interzona verde y azules y verdes la roja, siendo diferentes hasta la zona 9, en la que se unía el recorrido para realizar las 10 zonas restantes.

El recorrido de azules y verdes en esta primera jornada era más largo y contaba con una zona más, por lo que se estimó acertadamente que al llegar a la zona 9, esta ya habría sido superada por todos los pilotos amarillos. Dicho y hecho, así fue y no se vio ni una cola en todo el día a pesar de el gran número de inscritos, sin duda todo un acierto.

René Mabily y los franceses de las preciosas Motobecane

En la jornada del domingo se cambiaban los recorridos, por lo que azules y verdes realizaban el que no habían hecho el día anterior, encontrándose con 8 zonas nuevas para ellos, y viceversa para los pilotos amarillos. En esta ocasión sin embargo se formó un embotellamiento considerable en la zona 9, que además era una de las más difíciles, y es que al ser más los pilotos amarillos, aún no habían terminado de pasar cuando llegaron azules y verdes.

Este fue el único problemilla, que no fue tal, puesto que el tiempo concedido para realizar las 20 zonas de cada jornada se mostró suficiente, aunque tampoco había que dormirse para llegar a tiempo.

Las zonas discurrían por los lugares habituales, siendo algunas ya conocidas, otras mostrando importantes variaciones y otras siendo totalmente nuevas, por lo que cada año Cabrianes es diferente. En esta ocasión el nivel de dificultad se bajó ligeramente, con el fin de hacerlo más accesible a todos, lo que se notó en las penalizaciones. Éstá claro, el marcaje de las zonas de Cabrianes sigue siendo uno de sus mejores atractivos, ya que como siempre se notó la maestría de Jaume Casadesús y el resto del Triangle Magic... zonas muy bonitas, al más puro estilo clásico, largas y muy selectivas.

El italiano Fiorenzo Binda	Francesc Rodelas sobre la Sherpa 199B

Francesc Llort y la Sherpa 199, punteros en el nivel azul

Predominaba el terreno sobre tierra, con giros cerrados seguidos de fuertes subidas o bajadas, algunas zonas de piedra, etc. Todas ellas eran perfectas para sus respectivas categorías, ofreciendo un trial muy selectivo con algunas zonas más fáciles y otras más complicadas que marcarían las diferencias pero siendo todas ellas muy técnicas y teniendo que trabajar bastante para sacarlas a cero.

Como siempre una de las zonas consistió en el avituallamiento, contando esta vez con frutas como naranjas y plátanos, y sin temor a que se agotase el agua, pues en esta ocasión estaba situado en una población urbana junto a un parque en el que había una fuente, en lugar de en mitad del monte como otros años. Por supuesto no faltaba el porrón de vino, característico de Cabrianes y motivo del trofeo cerámico que se repartió a todos los participantes.

Sobre la interzona, nuevamente fue una preciosidad, recorriendo bosques y serpenteantes caminos durante más de 15 kilómetros en cada jornada, y variando en su primera parte según el recorrido que tocase, tal y como se ha comentado antes. Se trató de hacerlo más accesible para todos, en especial para los verdes, pero lo cierto es que para estos hubo algunos tramos de subidas realmente exigentes.

Al final de cada jornada, la sensación de hacer trial durante horas y quedar saciado de trial era lo mejor, tan sólo quedaba saciar otra cosa, el hambre, y para ello nada mejor que la tradicional comida de final del día en el polideportivo, con buena compañía y proyección de los videos de las anteriores ediciones. Las jornadas fueron duras, pero sin duda este trial es de los más bonitos y especiales del año. Veamos ya el repaso a las diferentes categorías.

Las Puma Racing causaron admiración como siempre	Alejandro Jaunot en acción

   Pre-65, triple victoria: Mick Andrews, Angel Magriñà y Richard Mollet

Pascal Malleval era sexto en pre-65

El nombre de Mick Andrews está ya íntimamente ligado a este trial y es que el mito británico, the magical Mick, no falla y edición tras edición llega a Cabrianes con la misma ilusión que un junior. Verle superar las zonas con su estilo, a sus 62 años es todo un gustazo, y ni los más jóvenes pilotos punteros pueden con él.

Rodeado de un buen grupo de amigos británicos y franceses, y por su puesto de su inseparable Jill, verle cada noche charlando, riendo y bromeando en El Café de Cabrianes es un espectáculo añadido a la carrera. Por supuesto no faltan las buenas cenas y las botellas de vino tinto, que van callendo como los ceros de Mick en las zonas, una tras otra...

La categoría Pre-65 va tomando cada vez más importancia en los Dos Días de Cabrianes, lejos quedan aquellas ediciones en las que sólo se daban cita cuatro o cinco motos de esta época, causando la admiración de todos. Ahora la cosa ha cambiado y más de 20 pilotos se daban cita en esta categoría, a los que también podríamos sumar los que corren en verdes con motos pre-65, ya que la categoría oficial lo hace por el nivel amarillo. Lo que no ha cambiado para nada es la admiración e interés que causan las motos más antigüas de cada trial, que va a más cada día.

Josep Puig y su James, séptimo empatado a puntos con Malleval	Angel Magriñá fue uno de los tres vencedores

El ex-piloto de sidetrial Pere Dot junto a Mick Andrews

En esta ocasión Mick Andrews también luchó por la victoria hasta el final, pero la simplificación de las zonas hizo que la cosa estuviesen realmente apretadas. Así Mick con su James finalizaba la primera jornada sin haberse dejado ni un solo pie en todo el recorrido, pero no era el único, lo mismo lograban Angel Magriñá y el francés Richard Mollet. Joan Figols y Pascal Maleval estaban a continuación con 2, y les seguían René Mabily y Josep Puig, como veis la lucha era de lo más internacional.

El segundo día las cosas no cambiaron, y al ser las zonas algo más sencillas no se pudo resolver el empate, así los tres pilotos de cabeza, Andrews, Magriñà y Mollet siguieron con la máxima concentración y sin cometer un solo error, por lo que ambos quedaban finalmente proclamados vencedores compartiendo la victoria.

En esta jornada otro piloto lograba también rodar a cero, Mabily, mientras Figols se dejaba dos puntos, por lo que ambos empataban a cuatro en el cómputo total, aunque el desempate era en favor de Figols, que era segundo y Mabily tercero. Maleval y Puig estaban a continuación empatados a seis, y el resto quedaba ya bastante más descolgado.

   Pre-72, Soldevila de nuevo en lo más alto

Ante el creciente éxito de la categoría Pre-65, la de Pre-72 ha quedado un poco pobre en comparación, en lo que se refiere a participación. Si bien otros años las motos Pre-65 se encuadraban dentro de la clase Pre-72, al final se ha optado por una separación, atendiendo a la gran evolución de la smotos españolas a partir de 1965. Así, en esta clase había esta vez sólo seis pilotos.

Algunos como José Luis Aguilera corrían con una Pre-65 pero en verdes

El excampeón de España y de Cataluña de la categoría, el simpático Josep Soldevila, volvía a correr con su marca de casi siempre, Bultaco, dejando atrás su paso por Pre-65 con la Montesa Impala Trial y por Trialeros con la Honda TLR. De nuevo en su ambiente y con la moto que tantos éxitos le ha dado en su vida, una Sherpa Kit, volvía a ser el gran campeón de siempre y ya en la primera jornada se colocaba líder con sólo 3 puntos, empatado con el madrileño Migui García, también con una Sherpa Kit.

Con un punto más les seguía nuestro compañero Ramón Sallés, con otra Sherpa Kit más, por lo que el dominio de Bultaco era claro. Algo más atras, con 7 estaba Joan Codinach, y a continuación Josep Ibern y Jaume Muntal empatados a 18.

En la segunda jornada la mala suerte era para Migui García, que debía retirarse con problemas mecánicos. Soldevila siguió igual de fino que el día anterior sumando otros tres puntos, con lo que la victoria era suya al sumar 6. Segundo era Joan Codinach con 17 puntos, empatado con Ramón Sallés, que era tercero. Y es que el segundo día Ramón sumaba más puntos de la cuenta, al preocuparse más de su labor de fotógrafo (gracias a lo cual podéis disfrutar de las fotos de este reportaje) que de hacer buenos pasos por las zonas, de hecho algunas las realizó sin siquiera bajarse a mirarlas, para poder así alcanzar a los pilotos que iban delante de él y hacerles fotos, bravo por él!!!

   Pre-77 Amarillo, Puma Racing Power

Manuel Casado con la interesante Aprilia con motor Hiro

La categoría pre-77 sigue contando cada día con más seguidores, aunque no tantos como se imaginaban en un principio, pues la mayoría sigue estando en Trialeros con motos de 1982 en adelante. Hace un par de años la división en Cabrianes estuvo en Pre y Post 80, para después pasar en la Copa de España y en la Catalana a Pre y Post 77. En aquella ocasión la división fue más equitativa, por lo que quizás hubiese sido más lógico establecer 1980 o incluso 1981 como año de división, mejor que 1977.

Pero centrándonos en lo que fue Cabrianes, en categoría Pre-77 de nivel amarillo se dieron cita sólo nueve pilotos, pero uno de ellos brilló con luz propia destacándose del resto, y este fue precisamente el más veterano, con más de 50 años a sus espaldas... Nos referimos al admirado José Luís Rodriguez "el Puma", que se distanció claramente de los demás a bordo de su especial Montesa Cota 247.

José Luís marcaba el primer día sólo 7 puntos, la mitad que su más inmediato perseguidor, Javier Cruz, que sumaba 15, mientras con muchos más, 30, estaba tercero Miquel Roca. El segundo día José Luís siguió causando sensación, ya no solo por la calidad impecable de sus preparaciones Puma Racing, y es que sus motos son las más deseadas de los paddocks, sino también por su pilotaje. Así José Luís volvía a marcar el mejor parcial con 8 puntos, mientras Javier Cruz volvía a ser segundo con 13. Enric Basté sumaba 22 y Jordi Carreras 23. Así al final la victoria era para "Puma" Rodriguez con 15, seguido de Cruz con 28 y Carreras con 46.

Otra moto interesante, la Yamaha Josep Estape	Oriol Canyameres con la Cota 242

Una de las motos más trabajadas, la Honda "Rothmans" de Bonaigua

   Post 77 (Trialers), Josep Puyol vuelve a ganar

Al igual que en Pre-72 y en Pre-77, en Trialers la victoria era para uno de los más veteranos y excampeón habitual, en este caso hablamos de Josep Pujol, que tras una temporada en la que ya no se le veía tan habitualmente en lo más alto del podio, ha vuelto al lugar en el que nos habíamos acostumbrado a verle.

Aquí también la lucha fue apretadísima, y en la primera jornada nos encontrábamos un triple empate a un punto entre Josep Puyol, Joan Marín y Enric Romeu, con 2 estaba Arnau Rafart, que con su nueva Merlin Gallach Réplica preparada por Puma Racing va a convertirse en un claro candidato a los puestos del podio, juventud y sangre nueva que es muy bienvenida al trial de clásicas para que este especialidad siga perpetuándose en el futuro...

Quinto era el vicepresidente de la RFME, Manuel Casado con 4, mientras el campeón madrileño B, Alfonso Sánchez Eguibar estaba a continuación empatado a 5 con el balear Joan Nadal, y con 6 le seguía el alma mater del nuevo club Motocat, Victor Martín con su preciosa Honda Rothmans, empatado con el madrileño Mauricio de los Casares y el mallorquín Joan Thomas.

Jordi Bou con merlin, juventud también en el trial de clásicas

El segundo día Pujol se mantuvo igual de fino que el primero, cosa que no pudieron hacer los demás, por lo que al final se hacía con la victoria al sumar tan sólo 2 puntos en ambas jornadas. Joan Marin se dejaba dos puntos esta vez, por lo que era segundo con 3 puntos, y Enric Romeu sumaba 5 y subía al tercer peldaño del podio. Tras ellos triple empate a 7 puntos entre Arnau Rafart, Alfonso Sánchez-Eguibar y Victor Martín, que finalizaban en ese orden en la categoría más numerosa, con nada menos que 77 participantes. .

   Verdes y féminas

Como cada año, en Cabrianes tienen cabida también los pilotos con menos experiencia, para ellos se creó hace un par de años el nuevo nivel verda, el más sencillo de todos, y que además hay zonas que no realizan, por lo que quien quiera puede disfrutar de este fantástico trial sin temor a que su nivel sea demasiado bajo.

Lo único es que en algunas ocasiones las mayores dificultades para estos pilotos no estuvieron en las zonas, sino fuera de ellas, en los tramos más duros de la interzona, con algunas subidas complicadas, pero que con algo de esfuerzo todos lograban superar, y sin la preocupación de que puntuase para la clasificación o estuviesen obstruyendo el paso.

Josep Zaragoza, sexto en nivel verde	Muy buena actuación de Alba Díaz, pero solo estuvo el domingo

Francisco Plana con la Honda TL 200

También en esta ocasión se creaba una categoría especial para las féminas, que realizaban los pasos verdes y reunió a dos valientes participantes, ya habituales en este trial de clásicas, Imma Oliveras y Alba Díaz, aunque la segunda de ellas sólo tomó parte en la jornada del domingo. En total eran 24 pilotos en este nivel.

Miquel Jaume se ponía en cabeza desde el primer momento, sumando 7 puntos, pero no muy lejos le seguían Xavi Navarro con 11 y César Vallve con 15, empatado con Francisco Plana. Las cosas siguieron igual en la segunda jornada por lo que al finel Jaume era el ganador con sólo 10 puntos, seguido de Navarro con 17 y Vallve con 18. Ya más atrás se colocaba el italiano Giancarlo Prina y el joven Alejandro Llorente.

   Mejoradas

Las categorías de mejoradas eran una de las grandes novedades en esta edición, aunque ni se vieron con muy buenos ojos por algunos, ni tuvieron demasiado éxito. El caso es que no se hizo ningún tipo de verificación técnica para comprobar que motos deberían estar o ono en esta clase, por lo que la elección fue totalmente libre y personal de cada uno.

Jaume Romeu sobre bultaco Sherpa 199A	El mallorquín Joan Jaume Bauçà, corria en Mejoradas

Jaume Vila y su Cota 349 Puma Racing, segundos en mejoradas azules

Encontrábamos así dos categorías Mejoradas amarillos y Mejoradas azules. En la primera se reunían sólo cinco pilotos y en la segunda cuatro. Pere Planas se hacía con una contundente victoria en amarillos al sumar sólo 14 puntos bastante más atrás quedaban Ignasi Pellicé (59), Joan Cunill (69) y Pere Cunill (96). Como veis las puntuaciones no fueron bajas por lo que pese a llevar motos "mejoradas" no hubiesen ocupado muy buenas posiciones en el nivel amarillo normal, lo que pone en duda que sea tan efectivo el llevar o no una moto mejorada, ya que lo más determinante en esto del trial es el piloto.

En Mejoradas azules el ganador era el francés Bertrand Babouhot con 42 puntos, seguido de los dos valientes Jaume Vila y Martí Font, con 62 y 66 respectivamente, y es que ambos son habituales del nivel amarillo y decidieron probar suerte en el azul, comentando al final del trial que la diferencia de nivel de las zonas era mucho más de la que esperaban, bravo por ellos, ya que lo hicieron realmente bien. Cerraba la tabla el balear Joan Jaume Bauça.

   Azules Pre-77, Joan Rovira hace lo imposible con la BSA

Pasamos ya al máximo nivel, el de las zonas azules, las más difíciles de Cabrianes, donde no hay nivel rojo, por lo que el azul es un poco más elevado de lo normal. Sin embargo este año las zonas habían bajado un poco su dificultad respecto a otros años, lo cual se notaba ligeramente en las penalizaciones.

Caius Mujal y su Ossa MAR empezaron bien, pero el segundo dia perdió ritmo

Como hemos comentado antes, la división en pre y post 77 en lugar de pre y post 80 como se hizo hace un par de años, hacía que la balanza estuviese bastante desequilibrada, con sólo 6 pilotos en Pre-77 y nada menos que 30 en Post 77. La verdad que correr en azules con motos Pre-77 tiene un mérito especial, pero en Cabrianes se nota menos que en otras pruebas ya que las zonas no cuentan con escalones o piedras, sino con muchas zonas de tierra y giros muy técnicos.

Esto hace que algunos pilotos que poseen varias motos, precieran acudir a esta cita con las más clásicas, las pre-77 en lugar de las posteriores, este fue el caso de Nacho Manzanero, que usaba su Sherpa "Manuel Soler" en lugar de la Merlin, o de Josep Mª Capdevila, que recuperaba su Sherpa 199 en lugar de acudir con la Fantic.

Pero quien más sorprendía era Joan Rovira, que en lugar de su Fantic 240 se presentaba a los mandos de un "auténtico hierro", la BSA Pre-65. Verle por las zonas con esta moto era alucinante. A veces había largas y empinadas rampas en las que parecía que la BSA iba a explotar, pero Joan Rovira sigue siendo el rey de las clásicas, y el primer día realizaba el mejor parcial de la clasificación absoluta de azules con un increible parcial de 6 puntos!!!

Nacho Manzanero con la Sherpa era segundo en azul Pre-77	Lo que hizo Joan Rovira con la BSA fue increible...

Josep Mª Capdevila volando con la Sherpa 199

Caius Mujal con su Ossa MAR era segundo en pre-77 con 22 puntos, mientras los amigos y rivales Nacho Manzanero y Lluís Galvany realizaban el trial juntos en una divertida competencia en la que ninguno cedía lo más mínimo, finalizando ambos con 27. Capdevila estaba tras ellos con 31 y Jové quedaba bastante retrasado.

En la segunda jornada casi todos mejoraron excepto los dos líderes, Rovira y Mujal. La ventaja acumulada de Rovira en el primer día le sirvió de auténtico colchón y le aseguró la victoria con un total de 30 puntos.

Manzanero realizaba el mejor parcial del día con 16, en un segundo capítulo de su pique con Galvany, que al final se quedaba a un sólo puntito del de Valdemorillo, ocupando la tercera plaza del podio. Capdevila era cuarto, Mujal descendía al quinto puesto y Jové era sexto.

   Azules Post-77, victoria de Carles Casas

Si en azules Pre-77 las cosas estuvieron apretadas, en Post-77 lo estuvieron aun más, con un buen número de pilotos realmente finos que realizaban impecables pasos por las zonas. Sin enbargo la victoria se disputó entre cuatro principales candidatos de los 30 participantes, Carles Casas, Ramón Membrives, Salva Rovira y Francesc Sardañés.

Salva Rovira era tercero en azules Post 77	Ramón Membrives con la Aprilia era segundo tras Casas

Por muy poco se quedó fuera del podio Francesc Sardanyés

El primer día Membrives era quien realizaba el mejor parcial con sólo 8 puntos, y a uno se quedaba el veterano Carles Casas con su nueva Cota 330, y es que a partir de ahora va a ser más habitual ver a Casas también en los triales de clásicas. Sardañés era tercero con 10, Rovira cuarto con 13 y el ex-mundialista Josep Arcarons se estrenaba con una Honda TLR prestada por Jaume Vila, siendo quinto con 15 en este primer día. Detrás todo estaba aún más apretado entre un buen número de pilotos.

El segundo día Casas realizaba el mejor parcial con seis, al igual que Salva Rovira. Ocho hacía Siscu Llort, nueve Membrives y 10 Josep Mujal. Por tanto al final era Casas quien ganaba la partida con un total de 15, arrebatando la victoria a Membrives por sólo dos puntos, y con 19 era tercero Salva Rovira, dejando a Sardañés fuera del podio por sólo dos puntos.

   Post Clásicas, espectáculo de Fujinami

Esta era otra de las grandes novedades en esta edición de Cabrianes, como ya hemos comentado anteriormente, pero sin embargo no tuvo el éxito esperado. Aunque en principio estaría reservada para los pasos azules, se dio la posibilidad de competir también en amarillos, por lo que al final los únicos seis pilotos que se presentaron con estas máquinas quedaron divididos en dos grupos.

Pep Colillas, colaborando en la organización y atendiendo a todo!	Ver a Fujinami en acción sobre esta Honda fue un espectáculo

Francesc Estrada prácticamente estrenaba esta impecable Honda

En el grupo de amarillos quedaron sólo dos pilotos, Javier Conde, que vencía con 12 puntos, y Xavier Arenas, que sumaba 34. Y en azules el gran atractivo estuvo en la presencia del Campeón Mundial, el japonés Takahisa Fujinami, a los mandos de una bonita y especial Honda RTL, aunque sólo durante la jornada del domingo.

Por supuesto Fuji fue el más seguido y aplaudido por el público, al que constantemente seguían los pasos un buen número de aficionados. Fuji se lo tomó con mucha alegría, y disfrutó en las zonas, concentrándose casi como en el mundial en algunas para sacarlas a cero, pero al mismo tiempo poniéndose a hacer filigranas y giros en el aire y botes con la rueda trasera como si fuese en su Cota 4RT.

La verdad que hubiese sido mucho más interesante ver a Fuji en una auténtica clásica, como hace unos años pudimos ver a Amós, a Manzi o en la última edición a Laia. El objetivo de Fuji era terminar la vuelta a cero en las 20 zonas, pero no pudo ser y se dejó un pie en la zona más difícil del día, la penúltima.

Precisamente su jefe de equipo, Miquel Cirera, due el vencedor de esta novedosa categoría, tras sumar 18 puntos el primer día y 5 el segundo, lo que totalizó 23 en total. Francesc Estrada llevaba la tercera Honda al podio, al sumar 83.

Y tras el trial la paellada y la entrega de trofeos, con algunas sorpresasl

Al final del trial gran fin de fiesta con la habitual paellada en el polideportivo entre charlas, risas, proyección de los videos del año pasado, y tras las palabras de agradecimiento de Jaume Casadesús, entrega de trofeos a cargo del maestro de ceremonias Ricardo Pinet, con la simpática ayuda de Fujinami, que ayudó a entregar los trofeos conmemorativos que había para todos los pilotos.

Y por si esto fuese podo, bajo una sábana había una sorpresa, sí, era una moto, ¿pero cual? Pinet llamó a Micka Andrews para proceder a destaparla cuando ante sus ojos apareció algo que fue una gran sorpresa para todos, y en especial para él, el auténtico prototipo de la OSSA MAR, una unidad única que se encontraba hasta ahora en Estados Unidos y que ha sido recientemente adquirida y restaurada por Joan Figols. Poder admirarla fue un gran regalo para todos.

Poco más queda por comentar de este trial, que año tras año se consolida como una de las citas más esperadas de Europa, y que aunque parezca imposible, se supera cada vez más, enhorabuena!!!

Fujinami comentó que lo había pasado realmente bien	Menuda sorpresa se llevó Mick Andrews al ver la Ossa Proto!!!

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