Motoshow Barcelona 2001

Este año, la moto se convirtió en la única protagonista del salón de Barcelona, ahora denominado Motoshow, después de muchos años en los que motos y coches compartiesen escenario. Por lo tanto esta vez la cosa iba sólo sobre motos y el recinto ferial Montjuïc 1 de Fira de Barcelona se vistió de gala para acoger nada menos que 476 expositores y 39 marcas de motocicletas en un espacio cercano a 50.000 metros cuadrados. La feria contó con diversas actividades, como la organización de jornadas técnicas, cursos de educación vial para los más pequeños, la posibilidad de realizar pruebas dinámicas de gran número de modelos en las pistas destinadas para ello, e incluso la posibilidad de pasar gratis la ITV de tu moto.

Pero vamos a lo que nos interesa, el trial. Realmente este salón fue bastante trialero, y pudimos encontrar gran número de novedades en casi todas las marcas. La Federación Catalana de Motociclismo realizó demostraciones de trial por parte de pilotos de entre 5 y 15 años, y puso a disposición de los visitantes más pequeños varias motos de trial infantiles para que diesen sus primeros pasos o para que se inscribiesen en los cursillos de trial que contaban con monitores de la talla de Lluís Gallach, José Manuel Alcaraz o Josep Manzano. También pudimos deleitarnos con las exhibiciones de dos pilotos de talla, como Pépe Sáez y Jordi García.

Comencemos con el repaso a los stands. El primero que se cruzaba en nuestro camino era el de Beta, que había hecho un gran despliegue y en el que lo más agradable era ver modelos que marcaron época. Ante un bonito póster de Pere Ollé, podíamos encontrar la Beta 240 que él mismo utilizó junto a la Beta TR 34 de 1987 con la que Jordi Tarrés consiguió su primera corona mundial. Y allí mismo estaban ambos protagonistas, por lo que aprovechamos para fotografiarles juntos en sus viejas monturas, rememorando así aquellos hermosos años. También podíamos ver el prototipo de la revolucionaria Beta Zero de 1989, aquel que sorprendió al mundo al aparecer en el trial de Piedralaves contando con chasis de aluminio monocasco, refrigeración líquida y horquilla invertida.

Pere Ollé y Jordi Tarrés con sus ex-motos

También en el stand de Beta estaban las motos más modernas de la marca, junto a su actual piloto, número uno, Albert Cabestany, el cual nos guió en la visita. Como modelos ya conocidos encontramos la Rev 3 2001 y la Beta 50 pequeña.

Pero también había novedades, destacando el prototipo Rev2 de 50 cc que saldrá próximamente al mercado y que se ha construido a imagen de su hermana mayor, la Rev3. Por otro lado encontramos la Beta Alp de 4 tiempos ya conocida desde el pasado año, a la que se une en esta ocasión una segunda versión más trialera. Ésta cuenta con neumáticos de trial, y para reducir el peso se han sustituido elementos como el faro o el cuadro de mandos por elementos más trialeros.

A medio camino entre la Rev3 y las Alp se encuentra la Rev3 modelo trail. Cuenta con intermitentes, soporte de matrícula, faros delantero y trasero de mayores dimensiones, silencioso también mayor y algunas otras variaciones.

Como veis, el Stad de esta marca fue de los más grandes pues a parte de dedicar un espacio exclusivo para su producción de trial, también tenía gran parte dedicada a los scooters y ciclomotores.

Ya faltaba poco para las 13 horas, hora en la cual daría comienzo la presentación de los equipos Gas Gas de trial y enduro de cara a esta temporada. Allí acudimos y pudimos ver a casi todos los miembros del equipo, salvo a Steve Colley y Bruno Camozzi. Un espectacular video amenizaba la espera, pero pronto comenzó la presentación, en la que los propietarios de Gas Gas, Narcis Casas y Josep María Pibernat, desvelaron sus planes deportivos y comerciales. A continuación, Jordi Tarrés, director del equipo deportivo de trial presentó a sus pilotos: Marc Colomer, Adam Raga, Jordi Pascuet, Jeroni Fajardo y los ausentes Colley y Camozi.

Casas nos desveló en una larga conversación que Gas Gas no apuesta por que el futuro del trial esté en los cuatro tiempos, según dijo, una moto de trial a de ser ligera, sencilla y barata, y la incorporación de un motor de 4 tiempos crearía una moto pesada, compleja y cara. En opinión de Casas hay que considerar el poco número de motos de trial que se fabrican y adoptar soluciones menos radicales, en este sentido destacó la utilización de la gasolina sin plomo y la posibilidad de incorporar un pequeño catalizador en el interior del codo de escape.

En cuanto a las novedades, hacía su aparición la Gas Gas TXT 50, un modelo que viene a cubrir el hueco entre la TXT Boy y la TXT 125, destinado a niños entre 9 y 14 años. De esta moto ya os ofrecimos en Todo Trial las primeras imágenes, y ahora se realizaba su presentación oficial.

La misma se encontrará disponible con motores de 50 y 80 cc y como nos contó Narcis Casas, Gas Gas pretende así cubrir el trial para todas las edades y asímismo tiene en proyecto realizar un plan de standarización en la fabricación de motocicletas infantiles, de modo que las federaciones y los reglamentos establezcan unos parámetros fijos en cuanto a edades, cilindradas y tamaños de rueda. De esta manera se daría algo más de uniformidad al mercado de las motos infantiles, en el que cada fabricante realiza las cosas de manera independiente.

En cuanto a la moto, como podéis ver en las fotos es una copia en pequeño de los modelos grandesy su terminación es realmente atractiva. Con ella Gas Gas entra en un mercado hasta ahora sólo atendido por marcas como Clipic.

Intentamos obtener alguna noticia sobre el modelo 2002, pero el secreto es grande, sin embargo Todo Trial ya informó hace unos meses de cómo será, recordadlo pinchando aquí.

Al igual que habíamos visto antes en Beta, Gas Gas también presentaba un modelo adaptado al excursionismo, y que tiene su razón de ser en la legislación de algunos países, que obligan a cumplir requisitos como la existencia de intermitentes, el soporte para la matrícula o la existencia de espejos.

Esta versión cuenta con un faro delantero de mayores dimensiones en el que van anclados los intermitentes delanteros. En la aleta trasera incorpora un soporte de matrícula que recuerda mucho a los modelos de enduro, y en el que también se acoplan los intermitentes. Otra diferencia importante es la petaca del tubo de escape, de mayor longitud.