Magic Mick, todo un éxito

   Cuando en Todotrial empezamos a hacer contactos con Mick Andrews hace ya más de un año, no nos lo podíamos creer, uno de los más grandes mitos en la historia del trial estaba encantado con Todotrial y no puso ni la más mínima pega para colaborar con nosotros, desde entonces lleva los adhesivos de Todotrial en su moto, en su casco, en su coche, usa las camisetas y las gorras Todotrial y nosotros estábamos muy contentos. Pero cuando Blai Jové de Aceites Myto y Esteban Arenas de Classic Team, los dos principales patrocinadores de Mick, nos propusieron organizar un cursillo con Mick como monitor, pensábamos que estábamos soñando.

   No lo dudamos y nos pusimos manos a la obra para montar un cursillo muy especial, y es que dicen que Mick es el mejor maestro del mundo, no en vano ha impartido cursillos de trial por toda la geografía universal desde hace ya muchos años. Pero un cursillo tan especial como este no podía hacerse a la ligera y no teníamos demasiado tiempo.

   Todotrial contaba con la ayuda de Myto Oil y de Classic Team, pero necesitábamos un Motoclub que nos echase una mano con los papeleos y trámites federativos y que mejor que contactar con MotoCRA, el motoclub especializado en motos clásicas de campo que además tenía gran vinculación con Internet. Juank, su fundador y presidente, tampoco lo podía creer, y como era de esperar se mostró muy ilusionado con la idea y nos ayudó al máximo. Además juank es un ossista, igual que Mick por lo que la sorpresa fue doble.

   Nos pusimos todos en marcha, en principio el curso sería en Madrid, pero después decidimos ampliarlo y hacer un segundo cursillo en Barcelona ante la gran demanda de pre-inscritos. Sin embargo las cosas no siempre salen perfectas, y este segundo fin de semana en Barcelona no lo pudimos realizar pues a Mick Andrews le salieron compromisos ineludibles en Alemania por lo que nos vimos obligados a cancelarlo, desde aquí pedimos disculpas a todos los que ya se habían pre-inscrito y lo esperaban ansiosos.

   Teníamos que limitar el ámbito del cursillo, para que fuese más o menos homogéneo, asi que decidimos orientarlo a pilotos con motos clásicas de todos los niveles y también a pilotos con motos modernas de nivel no muy elevado, de esta forma estábamos haciendo el primer cursillo orientado a trial clásico realizado en España.

   Ya contábamos con cerca de 50 pre-inscritos, pero no podíamos admitir un número tan elevado, así que limitamos las inscripciones a los 25 primeros que efectuasen la inscripción definitiva. Queríamos un buen cursillo con atención personal de Mick Andrews en todas las explicaciones, nada de masificaciones. De este modo optábamos por la calidad, a pesar de que ello conllevase la necesidad de que el precio de la inscripción fuese más elevado, conseguimos ajustarlo al máximo y ofrecer a los alumnos una buena atención y unas buenas contraprestaciones, creo que lo conseguimos pues todos quedaron contentos.

   Con la fecha ya encima tuvimos un grave contratiempo, pues el Ayuntamiento de Valdemorillo nos denegó el permiso de realizarlo en sus terrenos, ya que estos habían sido vendidos a una constructora y ya no eran de su competencia. El desánimo fue grande pues ya lo teníamos todo preparado, pero seguimos adelante sin rendirnos y logramos la gran ayuda de Manuel Casado y el club Sotobike, a los que les damos nuestro máximo agradecimiento pues sin ellos no hubiésemos podido continuar. Casado y los miembros del club Sotobike, Txiri, Chivi, etc, nos facilitaron un lugar para realizar nuestro sueño en un reducido terreno de Soto del Real, ellos se encargaron de todo, muchas gracias.

   Aquella semana el trabajo y los preparativos fueron agobiantes, nuevos permisos, nuevos restaurantes, nuevos hoteles, había que cambiarlo todo, pero afortunadamente la cosa salió bien. El terreno era muy reducido y no se podrían realizar excursiones como Mick quería, pero en este país las cosas están muy difíciles últimamente para los trialeros, cosa que a Mick no le gustó nada.

   Llegó el día esperado

   El sábado a las 10 de la mañana se cumplio el sueño, la gente empezaba a llegar, en su mayoría apasionados del trial que deseaban que llegase el momento de conocer en persona a Mick Andrews. Quedamos junto a la sede del club Sotobike en Soto del Real, Juank de Motocra se encargaba de confirmar las inscripciones y verificarlo todo, a la vez que obsequiaba a cada inscrito con una camiseta de Motocra. Una vez estuvimos todos cogimos las motos y nos dirigimos a la zona de entrenamientos, a kilómetro y medio de distancia, y allí estaba esperando el mito, Magic Mick. Hacía más de 30 años que Mick no volvía a Madrid, la última vez fue en 1971 con ocasión de los 6 Días de Enduro celebrados en El Escorial...

   Mick ya había estado preparando el terreno y marcando algunas zonas o ejercicios. El cursillo contaba con Mick como gran protagonista, y echándole una mano como monitores estábamos Blai Jové, Ramón Sallés y yo. En seguida nos reunimos alrededor de Mick, y este sorprendió a todos desde el primer momento por su accesibilidad y simpatía, y es que Mick es un tio sencillo y cachondo. Se presentó a todos y fue estrechando la mano de uno en uno, "Hola, yo soy Mick Andrews" les decía. Nuestros compañeros de la revista Motoclásica no quisieron perder la oportunidad de conocer a Mick y allí estuvieron Angel de la Maza y Carlos Polo, que seguro nos sorprenden con un bonito reportaje sobre el cursillo.

   Y empezaba el cursillo, Mick tomó una moto y un piloto como ejemplo, que resulté ser yo, y con la moto parada, yo sobre ella, Mick sujetando y todos en círculo alrededor comenzó sus valiosas explicaciones sobre los aspectos más básicos, la postura de conducción, los repartos de pesos, el manejo de la moto, los ajustes... Muchas cosas interesantes de las que hasta los más expertos aprendían. Como no todos hablan inglés, Ramón se ocupaba de ir traduciendo todas las explicaciones de Mick.

   Mientras, Juank había montado una gran carpa, una mesa con algunas sillas, así como un cubo con bebidas y por su parte Esteban había sacado su gigantesca caja de herramientas y comenzaba a reparar y ajustar gran cantidad de motos, fue uno de los que más trabajó en todo el fin de semana, puestas a punto, ajustes de carburación, suspensiones, problemas eléctricos, hizo de todo. Muchos eran los que se acercaban a Esteban para hacerle consultas de todo tipo, sobretodo al ver como tras pasar por sus manos algunas motos que parecían muertas resucitaban. El pobre Esteban casi no pudo ni comer...

   Tras cada explicación teórica Mick cogía su James de 1963 y nos deleitaba con algunas demostraciones, incluso realizó varios ejercicios y zonas pilotando con una sola mano, sorpredente. Tras esto era el turno de los alumnos, que fueron realizando cada uno de los ejercicios anteriormente explicados por Mick, donde se demostró que tanta información aprendida no se asimila con facilidad, y es que son muchas las técnicas que hay que aplicar y aprender, desde luego la práctica será la que irá perfeccionando el estilo de cada uno.

   Mick iba vigilando las evoluciones de cada uno, y de vez en cuando les paraba para corregir sus errores. Una vez completado un ejercicio, de nuevo se paraban todas las motos y se explicaba otra cosa, subidas, bajadas, giros, escalones, laderas... cada una de las explicacines seguida de su zona y de sus prácticas, y así ambos días.

   La comida del sábado se hacía esperar pero por fin llegaba, bajo la carpa nos esperaba una abundante paellada, acompañada de tortillas, croquetas, jamón, pimientos, frutos secos... La única pega fue que no había sillas suficientes, pero bueno, estábamos en el campo...

   Cursillo de mecánica por Esteban Arenas y visita al museo de Manuel Casado

   Para hacer la digestión tranquilamente, nos reunimos en una sombra frente a Esteban y tuvimos más de hora y media de interesantísimo cursillo sobre mecánica, en el que Esteban nos contó cantidad de consejos, curiosidades e incluso trucos de motos de competición. También resolvió multitud de dudas, aquello casi se convirtió en un consultorio y todos teníamos un montón de preguntas que hacer.

   Blai también colaboró dándonos interesantes explicaciones sobre todo lo referente a aceites y productos de todo tipo, explicando su funcionamiento y el porqué de sus propiedades. Fue algo realmente interesante y todos escuchábamos con mucha atención. No en vano Esteban Arenas (Classic Team) es el preparador de la mayoría de las motos clásicas de trial que corren los campeonatos catalán y madrileño.

   Una curiosidad fue cuando Mick sacó un extraño aparato y nos lo enseñó a todos, era muy parecido a un carburador, pero se trataba de un inyector que fue construido por él mismo en su época con Yamaha, moto en la que fue equipado ganando los Scottish de 1974 y 1975. Sólo existen dos inyectores como este el otro se lo prestó a un amigo para que lo probase en su moto y ahora no se lo quiere devolver, por algo será... Y es que Mick además de magnífico piloto es un gran ingeniero. El porqué de su no construcción en serie fue el de siempre, los elevados costes de producción, ya que lleva elementos que sólo pueden ser realizados a mano.

   El tiempo había volado y ya eran cerca de las seis de la tarde, repartimos las bonitas sudaderas de Mick Andrews (que podéis comprar en Todotrial Shop) y volvimos al pueblo donde nos esperaría otra actividad interesante, la visita al impresionante museo de trial de Manuel Casado.

   La colección de Manuel es realmente impresionante, probablemente la mejor colección de motos de trial del mundo, no sabemos cuantas motos había en las habitaciones del museo, pero seguramente más de 300, todas las Bultaco, Montesa y Ossa, la mayoría de las Fantic y muchas otras marcas como Honda, Yamaha, Suzuki, Kawasaki, Garelli, Gas Gas, Aprilia, Beta, Italjet, Villa, SWM, Alpha, JJ Cobas, Merlin, Triumph, JP, Alfer, Mecatecno, Armstrong... ¿me dejo alguna? Entre ellas piezas muy dificiles de encontrar y además paredes llenas de posters y fotos no menos interesantes, la experiencia fue muy bonita y todos, alumnos, monitores, acompañantes y hasta el mismo Mick salían entusiasmados.

   Y el domingo más

   Tras una magnífica primera jornada, faltaba el segundo día y el fin de fiesta. A la misma hora en el mismo sitio, todos partimos a la zona de entrenamiento donde Mick y Blai nos esperaban con seis zonas trazadas al acecho. Antes de nada más explicaciones sobre técnicas más avanzadas, laderas con giro, subidas y bajadas con giros, algo de movimientos en parado para motos modernas, algo de trucos en competición o la forma de plantearse las zonas y las carreras, y siempre con alguna anécdota curiosa, como la de porqué no venció su sexto Scottish a causa de la dureza de un control de zona...

   Tras esto nos esperaba un mini trial, con 6 zonas y tres vueltas, en el que los monitores y algunos voluntarios hacíamos de control y anotábamos las penalizaciones, para que todo fuese lo más real posible. Las zonas eran de todo tipo, roca, tierra con giros, laderas, escalones, subidas, bajadas, piedra suelta... Sacarlas a cero no era fácil y la gente se motivaba cada vez más. Como no era un trial de verdad todo resultó un poco desordenado, algunos pasaban la misma zona 5 veces seguidas, los más novatos ni bajaban a mirarlas y los más expertos se lo tomaban como un trial de verdad haciendo las zonas de una en una en tres pasadas y examinándolas cuidadosamente.

   Así discurrió casi toda la mañana y cerca de las tres recogimos todo y nos dirigimos al restaurante Cazador de Soto, donde nos esperaba una comida a base de lentejas y carne y la posterior entrega de placas conmemorativas, diplomas de la MATA (Mick Andrews Trials Asociation) y un cursillo de Mick Andrews por escrito firmado personalmente. No faltaron las continuas peticiones de autógrafos, toma de fotos y por supuesto bromas y risas en un ambiente de lo más distendido y agradable.

   Al final despedidas, felicitaciones y todos a casa con una sonrisa de oreja a oreja, muchas gracias a todos por vuestra asistencia.

Fotos de los cursillistas y de la entrega de diplomas, pinchando aqui

Previo cursillo