Dos Días de Cabrianes
29-30 Octubre, 2005
Barcelona, España
X Trial Internacional de Clásicas de Cabrianes

Texto: H. San Martín
Fotos: Ramón Sallés, H. San Martín

Toda una década de trial de clásicas, un diez para Cabrianes

Montones de pilotos y sus clásicas acudieron un año más a Cabrianes, y van 10

El Trial de Cabrianes ha cumplido ya una década, y lo ha hecho de la mejor manera posible, confirmando que es uno de los mejores trial de clásicas del planeta y que, aunque tímidamente, cada año se sigue superando y no deja de sorprender a sus seguidores, que cada vez son más. No hay trialero amante del trial de clásicas que no desee con ansia la llegada de la fecha de Cabrianes, los que van repiten siempre que pueden, y los que aún no han ido no pueden ocultar sus ganas por ir.

Y es que Cabrianes ha ido cogiendo solera con el paso de los años, se ha convertido por derecho propio en el trial de clásicas por excelencia, la pura esencia de lo que debe ser, el espejo en el que miran todos aquellos que quieren saber que es un verdadero trial de clásicas.

Un trial que transmite ese espíritu del trial de los años 70, en el que las motos españolas de campo estaban en su edad de oro, y los aficionados admiraban las evoluciones de pilotos como Mick Andrews, Martin Lampkin, Yrjo Vesterinen, Malcolm Rathmell, Ulf Karlson, Toni Gorgot o Manel Soler entre otros muchos, el trial que vivimos aquí y que para muchos fueron los mejores años de este deporte. En otro concepto distinto están los triales de clásicas británicos o franceses, con sus pre-65 y sus máquinas 4 tiempos, pero Cabrianes no es eso, Cabrianes es el trial de los 70, y ya el decano del trial de clásicas en España.

En el paddock ya no cabía ni una alfiler, la afluencia fue masiva

Y lo que ha convertido a Cabrianes en el trial "decano" de las clásicas, no es solo sus diez años de existencia, sino lo característico de sus recorridos por los bonitos montes del lugar, lo largo de su interzona, pilotos llegados de todos los rincones de Europa, el mejor ambiente de compañerismo, la gran variedad de motos de todas las épocas, y en especial el impecable marcaje de sus zonas para cada una de los tres niveles existentes. Con lo exigentes que somos los trialeros, pocas veces todos se muestran contentos con el marcaje de las zonas, para unos fáciles, para otros difíciles, para otros peligrosas, largas, cortas, rebuscadas, absurdas, no selectivas o demasiado ratoneras... casi siempre en cada trial hay pegas y objeciones, pero en Cabrianes... sucede todo lo contrario, los pilotos se muestran encantados, y la palabra más escuchada es simplemente "perfectas"... Tanto que para muchos se ha convertido en auténtico ejemplo a la hora de hacer otros triales de clásicas.

El artífice y alma mater de todo esto es una única persona, Jaume Casadesús, eso sí, ayudado por un buen grupo de amigos incondicionales que cada año acuden a colaborar en lo que haga falta, y es que los controles de zona de Cabrianes también se han convertido en fijos y uno de los numerosos puntos positivos de este trial. En esta ocasión colaborando en la organización de la prueba repetía el Moto Club Baix Berguedá, y también un año más, repetía como director de carrera y animador de la fiesta el venerado Ricardo Pinet, esta vez sin su inseparable esposa Vera, convaleciente a causa de un accidente de moto, la deseamos una pronta recuperación.

El parque cerrado, cada vez con más y mejores motos
La rampa de salida en la X edición de la prueba

Cada vez mejor

Buen ambiente, amigos, motos, trial puro por todos los rincones

La novedades de esta edición no eran muchas, pero por algún motivo todo fue diferente y aunque parecía ya imposible, Cabrianes volvió a superarse y a mejorar. Una de las claves fue probablemente los cambios en la interzona, que en algunas ocasiones se realizaban en sentido inverso a otros años, haciendo que todo pareciese nuevo. Algo similar ocurría con las zonas, desaparecían algunas, se incorporaban otras nuevas, otras variaban profundamente sus trazadas o su sentido, haciendo que casi todo fuese diferente. En total 20 zonas distintas sin repetir una sola durante la primera jornada, y 20 más en la segunda, de las cuales siete eran nuevas respecto al día anterior.

El tiempo de cinco horas se mostró justo el primer día, a causa de un abultado embotellamiento que se formó en la zona siete. Resulta que este año los pilotos verdes y azules comenzaban por las zonas situadas a la izquierda de la población, mientras los amarillos comenzaban por otro lado, es decir, la buena idea de los dos bucles que ya se realizó en años anteriores para evitar atascos. Sin embargo este año a partir de la zona siete, la de la mina, todos los pilotos seguían el mismo recorrido, y esto provocó un monumental atasco el sábado, por lo que la organización decidió ampliar en una hora el tiempo máximo permitido, evitando así las prisas y las penalizaciones por tiempo de las que tanto se quejaron los pilotos hace dos ediciones. En la segunda jornada todo transcurrió con normalidad, y pese a contar con unos 150 inscritos, no hubo prácticamente colas en las zonas, de nuevo un éxito organizativo.

Todotrial y Trial Magazine también estuvieron y colaboraron con la organización de Cabrianes

Como en el año anterior había tres niveles de dificultad, siendo el más elevado el azul, tras la desaparición del rojo, después estaba el nivel intermedio o amarillo, y también el más sencillo, el verde, que cada año toma más protagonismo con un significativo aumento de participantes, donde se apuntan los que desean pasar un buen fin de semana sin preocupaciones, los que se inician, o los que retoman el trial tras muchos años de inactividad.

Los tres niveles estaban a su vez subdivididos en varias categorías, tal y como podéis ver en las clasificaciones. Los azules o expertos se dividían en pre y post 77 atendiendo al año de fabricación de la moto, una distinción diferente a la del año anterior, en la que el año 1980 era el que dividía las do clases. Esto hizo que mientras el año pasado (pre y post 80) los pilotos expertos se dividieron casi al 50% entre ambas categorías, este año la mayoría quedase encuadrada dentro del post-77, al final hubo 27 pilotos en post 77 y sólo seis en pre-77, por lo que quizás la división en esta clase sería mejor como antes, en pre y post 80.

En el nivel amarillo había más subdivisiones, en primer lugar la clase más veterana, pre-65, que batio records con 20 participantes, a bordo de auténticas joyas, ver las evoluciones de estas clásicas por las zonas es realmente un regalo para la vista. Después estaba la categoría Pre-72, que contó con 11 pilotos, por lo que queda demostrado que cada vez son más los que prefieren disfrutar con clásicas lo más antiguas posible. Y finalmente la subdivisión pre y post 77, con 16 y 57 participantes respectivamente.

No faltaron las bromas, aquí el francés Erik Cugniet y su curioso pantalón
El mito, Mick Andrews no se pierde ya ningún año esta cita

En la salida tampoco podía faltar Ricardo Pinet

El nivel más sencillo y accesible, apto para todos, era el verde, con 22 participantes, entre ellos dos chicas que entraron a formar una nueva categoría destinada especialmente para ellas.

Comienza el espectáculo

La mañana del sábado, en el habitual paddock formado en el campo de futbol de Cabrianes, junto a la escuela, se presentaba agradable y soleada, con una temperatura muy suave para estas fechas del año. Montones de coches y furgonetas llegaban, cada uno cargado con motos a cada cual más bonita, más especial.

Impecables restauraciones, preparaciones racing que quitaban el hipo, modelos difíciles de ver, y clásicas muy veteranas, como las espectaculares pre-65 que traían los pilotos británicos y franceses, sin olvidar las originales y bonitas transformaciones de motos españolas, como las Montesa Impala Trial realizadas por Ramón Membrives o la Bultaco Sherpa N 200 Trial realizada por Joan Figols. Todas ellas las podéis ver en el tradicional apartado "las motos de Cabrianes".

En Cabrianes se ven todo tipo de motos, como esta Cagiva-Merlin

En la parrilla situada junto al pabellón se preparaban sabrosos bocadillos de butifarra para desayunar, al igual que en El Café. Los pilotos llegados de los más diversos lugares (Gran Bretaña, Francia, Italia, Baleares, Valencia, Madrid y por supuesto Catalunya) se iban reencontrando y comentando las últimas restauraciones, preparaciones y demás batallitas.

Con tantos amigos y tantas joyas a las que admirar casi no había tiempo para atender a todo. Las motos se iban colocando en el parque cerrado, más rico que nunca, Ricardo Pinet iba llamando a los pilotos para subir a la rampa y darles la salida, mientras realizaba bromas sobre los presentes, y los pilotos más profesionales se mezclaban con las viejas glorias y con los aficionados, sin distinción alguna de clases o status.

Allí estaban Mick Andrews, que no se pierde ni una cita de Cabrianes, acompañado de su esposa Jill, Miquel Cirera, Salva García o Carles Casas, como ex-pilotos mundialistas, junto con otros jóvenes mundialistas como Sergi León o Laia Sanz, que se estrenaba en esto de las clásicas y como siempre venía dispuesta a ganar en la máxima categoría, tal y como hicieron Amós Bilbao o Josep Manzano anteriormente.

También las chicas van sumándose a la afición por el trial de clásicas, como Imma Oliveras...
... o Laia Sanz, que se estrenaba en clásicas sobre esta Honda venció en la categoría azul post 77

Sorprendente Carles Casas, venció en Azul Pre 77

Por delante esperaban a los pilotos casi seis horas del mejor trial, los recorridos más bonitos y las zonas más perfectas. Estas eran predominantemente de tierra, con algo de piedra suelta en algunas ocasiones, pronunciadas subidas y bajadas, giros, realmente técnicas y selectivas, pues en todas se podía hacer desde un cero hasta un fiasco.

Nivel azul, Laia pudo con todos en post 77 y Casas venció en pre 77

La estrella invitada de esta edición era la Campeona del Mundo de Trial de Féminas Laia Sanz, que se tendría que enfrentar a auténticos figuras en esto del trial de clásicas, como el Campeón de España y de Catalunya Master Joan Rovira, o el exmundialista de Scottishtrial Sergi León. Laia participaba con una impecable Honda TLR 250 de Ramón Membrives y como cada vez que toma la salida en un trial, iría dispuesta a ganar.

Ya desde las primeras zonas demostró su buen estilo, adaptándose muy bien a las clásicas, con un perfecto tacto de gas, trazando de modo impecable y sin las típicas tentaciones de los pilotos habituados a las motos modernas, como hacer cambios, saltitos y demás filigranas.

Joan Rovira quedó segundo a un sólo puntito de Laia
El de Trial Magazine-Todotrial Nacho Manzanero y su Merlin "Puma"

El finísimo Lluís Galvany era el que llevaba la moto más antigua en azules

La clasificación estuvo apretadísima, y la emoción perduraba zona tras zona. Laia marchaba a cero, pero cometió un desafortunado fiasco cuando se le caló la moto. Al final el líder del día era Joan Rovira sobre su Fantic con tan sólo 5 puntos, uno menos que Laia, y en tercera posición empate a nueve entre Sergi León y el veteranísimo Josep Mª Serra, que con su Cota 242 sorprendía una vez más. Xavier Sardañés y su Merlin estaban a continuación con 10, y algo más atrás estaban Francesc Llort, Nacho Manzanero y Edu Vila con 16, 18 y 19 respectivamente.

En Pre-77, el duelo estaba servido entre dos montesistas de pro, Carles Casas y Miquel Cirera, a los que previsiblemente se uniría el Campeón de Catalunya Expert Josep Mª Capdevila. Pero Casas sorprendía zona tras zonas, con su típica tranquilidad, sin prisas, iba realizando las mejores pasadas por las zonas sobre una Cota 348 que le había prestado Cirera, con la que ya corrió hace dos años. Al final se colocaba líder aventajado con sólo 6 puntos, lo que le situaría segundo empatado con Laia en una clasificación scratch azul. Segundo se colocaba Cirera sobre su habitual Honda oficial ex-marland Whaley con 26, seguido de cerca (28) por la Sherpa de Capdevila, mientras algo mas atrás se colocaban Lluís Galvany sobre la Cota 247, Carlos Varadé con la Sherpa y Blai Jové quedaba fuera de clasificación al llegar tarde y tener que empezar el trial en la zona 8, sobre una Ossa MAR.

Ciscu Llort sobre la Bultaco Sherpa 199
Francesc Estrada volvió a sacar del garaje la bonita Ossa TR 80

Bosco Lladó, el más juerguista de la Colla Can Rovira

La segunda jornada sería la definitiva, y el duelo Rovira-Laia seguía muy emocionante. Sergi León no se presentaba, pues su jefe de filas Gerard Llopart tampoco acudía. Con muchas zonas repetidas las penalizaciones bajaban, y Laia sorprendía nuevamente finalizando el recorrido con un solo punto por los tres de Joan Rovira, con lo que finalmene se hacía con la victoria final por tan solo un punto, enhorabuena. La tercera plaza final era para Serra, que con ocho puntos el domingo firmaba uno de sus mejores triales en los últimos años, y eso que es uno de los más veteranos, si no el más, de la categoría. Sardañés, Llort, Manzanero y Vila ocupaban las siguientes posiciones, algo más alejados del trio de cabeza. A destacar la actuación este día del ex-mundialista y ex-mochilero de los campeones Tarrés y Colomer, Salva García, que aunque el primer día no acababa de afinar y encontrar la forma, el segundo se puso las pilas y consiguió el tercer mejor parcial con seis puntos.

En pre-77 la cosa estuvo mucho más apretada entre Casas, Capdevila y Cirera, este último mejoró mucho y sumaba tan sólo 10 puntos, el mejor parcial del día, pero no era suficiente para superar a Casas, que era finalmente el ganador con un total de 23, seguido de Cirera con 36 y de Capdevila con 43, cerrando la tabla Galvany y Varadé.

El de Todotrial Carlos Caradé sobre la Sherpa 199A
Miquel Cirera sobre la Honda ex-Whaley era segundo en Pre 77

Angel Magriñà con la BSA era tercero en Pre-65

Pre 65 y Pre 72

Esta es sin duda la categoría más admirada en Cabrianes, y es que las motos más antiguas despiertan pasiones, y ser capaz de competir con motos tan clásicas merece el respeto de todos. Muchos son los que afirman que el trial con estas monturas es mucho más divertido, pues las diferencias se reducen más aún, y el mérito es mayor.

La gran figura de la categoría, y del trial en sí, era el mítico tres veces campeón de Europa Mick Andrews, que volvía a bordo de su James. En Pre-65 se reunían 20 pilotos, todo un record. En realidad había más motos Pre-65, pero algunos pilotos británicos de avanzada edad prefirieron competir en el nivel verde. En Pre-72 se reunieron once pilotos.

El primer día las cosas estuvieron muy apretadas en Pre-65, pero Mick Andrews demostró su gran nivel una vez más y no se dejó ni un sólo punto, pese a sus 61 años. Joan Figols se colocaba segundo, estrenando una preciosa Sherpa N pre-65, que había transformado en trial tal y como hicieron en la época pilotos como Dan Shorey, de hecho algunas Sherpa N llegaron a participar en los Seis Días de Escocia. Recordemos que la Sherpa N no era una moto de trial, sino de todo terreno, pues la primera Bultaco específicamente de trial fue la Sherpa T "Sammy Miller" de 1965, siendo precisamente la que originó la clase pre-65 en Gran Bretaña, al acabar con la egemonía de las marcas británicas.

El veterano británico John Tye, con Francis Barnett

Angel Magriñá con su BSA se colocaba tercero con 3 puntos, y a continuación empatados a 6 estaban la BSA B40 de Ramón Sallés y la Impala Trial de Ramón Membrives. A continuación los franceses Pascal Malleval y Bruno Gibert.

En Pre-72 el que se colocaba líder era Martí Font, con sólo dos puntos, sobre su afinadísima Sherpa Kit "racing Puma" tras él estaba con cuatro el finísimo Ricard Monje y su Sherpa modelo 49, y algo más atrás se colocaban Joan Codinach con 7 y Josep Soldevila con 9. Pim Terricabras cometió demasiados fallos y quedaba relegado a la quinta plaza.

Llegaba la segunda jornada y la presión por la victoria era máxima, ya que no se podía cometer un sólo fallo. Joan Figols y Mick Andrews marchaban a cero, pero esta vez quien cometía un error era el británico, mientras Figols finalizaba con la tarjeta impoluta. Al final el empate a 1 punto se resolvía en favor de Mick, por haber cometido el error más tarde. Angel Magriñá también rodaba esta vez con un sólo punto, y era tercero con cuatro. Mala suerte para nuestro compañero Ramón Sallés, que rompía la moto y se veía obligado a la retirada, con lo que Ramón Membrives no tuvo problemas en adjudicarse la cuarta plaza, por delante de Bruno Gibert, Pascal Malleval y Ramón Seuba. Mala suerte también para los otros cinco retirados por problemas mecánicos: Javier Cruz, José Carlos Lorente, Tomás Pérez, Ramón Palau y el campeón en expertos Lluís Díaz Bedate, que hubiese sido candidato a la victoria.

Figols estrenaba su Sherpa N Trial con un segundo puesto tras Mick Andrews
Manuel Casado con su Montesa Cota 247 era el ganador en amarillos Pre-77

Alvaro Díaz "Txiri" sobre la Sherpa "Manuel Soler"

El segundo día en Pre-72, Martí Font seguía en buena racha, y completaba las 20 zonas con la mejor puntuación, cero puntos que le daban la victoria. Ricard Monge sumaba otros cuatro, cmo el día anterior y era finalmente segundo, a un sólo punto de Joan Codinach, que tuvo un ben día al marcar sólo 2 puntos. Josep Soldevila y Pim Terricabras cerraban el quinteto de cabeza.

Amarillos Pre y Post 77

Como siempre el nivel intermedio es el que más aficionados reune, encuadrándose aquí los pilotos con monturas posteriores a 1972 y a su vez subdivididos en pre y post 80, con 16 y 57 participantes respectivamente.

En Pre 77 era el conocido coleccionista y vicepresidente de la RFME Manuel Casado quien se colocaba líder en la primera jornada con tan sólo tres puntos, sobre su impecable Cota 247. Tras él encontramos un triple empate a siete puntos entre Bruno Mortet, Francesc Carbonell y Josep Mª Casanova, con uno más estaba Josep Gibert y con otro más Xavi Pons. Martí de Riquer estaba a continuación pero con 14 puntos de penalización por tiempo, y es que aquí hubo varias penalizaciones por este motivo a pesar del incremento de una hora, al ser los más perjudicados tras el embotellamiento de la zona de la mina.

Mario Casado en la zona 20 sobre la Honda LR

En Post 77 las cosas estaban aún más apretadas, el campeón de Trialers, Josep Pujol, empataba a cinco con el francés Alphonse Chardonerau, con un punto más estaban también iguales José Luís Rodríguez "el Puma" y Pere Planas, y con siete puntos otro doble empate entre Enric Romeu y Jaume Romeu, la cosa queda en casa. Tras ellos Joan Forté con ocho y el joven y simpático Arnau Rafat con nueve.

Llegaba el segundo y definitivo día, Manuel Casado era acechado en su liderato por varios pilotos que no se dejaban fallos, de hecho tres de ellos lograban finalizar a uno: Bruno Mortet, Agustí Vila y Josep Abant, el padre de las dos niñas campeonas del mundo de Biketrial, que se encontraban por el paddock haciendo diabluras con sus bicis, y que siguieron el trial en moto. Los cinco puntos de Casado fueron suficientes para mantener el liderato y hacerse con la victoria empatado a puntos con Bruno Mortet pero con mayor número de ceros. Cerraba el podio Francesc Carbonell, con un sólo punto más. Josep Gibert, Josep Mª Casanova y Agustí Vila se situaban a continuación con 12, 13 y 14 respectivamente.

Tambien la tensión era total en post 77, tres pilotos rodaban a cero, Josep Pujol, José Luís Rodríguez y Enric Romeu, por lo que la cosa finalizó en ese mismo orden con 5, 6 y 7 puntos respectivamente en el total de ambas jornadas.

Jorge de Lorenzo sobre la Fantic 240
Josep Pujol fue el ganador en amarillos Post-77

José Luís Rodriguez "El Puma" era segundo a un punto de Pujol

Pere Planas era cuarto con 8, y a continuación Jaume Romeu (11), Nacho Tamargo (12) Alphonse Chardonerau y Joan Forté empatados a 13. Más igualdad imposible, lo que facilita que muchos sean los candidatos a la victoria, otra de las grandezas del trial clásico.

Verdes y féminas

El nivel verde era el más accesible, para muchos la manera de mantener su afición por el trial de clásicas, al poder participar en zonas muy accesibles y nada peligrosas, para otros la forma de introducirse en el trial de clásicas y disfrutar de un trial tan bonito como este. El número de inscritos es cada vez mayor y esta vez con 22 participantes se volvieron a batir records. Quizás para ellos la interzona en algunos momentos resulto más dificil y dura que las propias zonas, pero así es Cabrianes.

El primer puesto final fue para Cesar Vallve, que se colocaba primero el sábado y mantenía hasta el final su posición, terminando con 16 penalizaciones, segunda plaza para Josep Zaragoza con 19 puntos, que también mantuvo la posición desde la primera jornada, y tercer puesto para Enric Mateu, que protagonizó una buena remontada el domingo, logrando el mejor parcial del trial con cuatro puntos.

Tras cada jornada la habitual comida en el pabellón de Cabrianes

Tras él se colocaban Miquel Jaume, Xavi Navarro, Miquel Tàpia y Manolo Fernández Palencia. Muchos pilotos corrieron una sola jornada, por lo que en la otra figuran como retirados en las clasificaciones.

La nueva categoría de féminas trata de animar a las chicas para que también participen en los triales de clásicas. A parte de Laia Sanz otras dos se presentaron en Cabrianes, Alba Díaz con su Honda TL 200 Imma Oliveras que se introducía en este bonito mundillo con su Ossa TR 80 "amarilla". Alba fue la ganadora gracias a su experiencia, al haber participado ya en pruebas como los dos días de Robregordo, pero Imma no lo hizo nada mal y seguro que dará sorpresas pronto.

En definitiva una nueva edición que finalizaba con un nuevo éxito en su décimo cumpleaños, y esa es precisamente la nota que merecería esta última edición, un diez para Cabrianes.


Podio Pre-65, con Joan Figols, Mick Andrews y Angel Magriñà, junto a Ricardo Pinet


Podio Azul Post-77, con Josep Mª Serra, Laia Sanz y Joan Rovira


Los pilotos madrileños del Moto Club Sotobike, quisieron entregar una placa a Jaume Casadesús por su gran labor

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