Villar del Olmo	18 de mayo, 2003
2ª de 8
Campeonato de Madrid			Texto y fotos: Horacio San Martín

   El campeonato de Madrid de trial está este año un poco triste, su inicio se ha hecho esperar hasta la primavera con el pasado trial de Colmenar, el número de pruebas puntuables ha descendido y casi todas las fechas del campeonato se han puesto en los meses de primavera verano, sin haber podido disfrutar este año de los bonitos triales invernales.

   Así, con calor, en Villar del Olmo se celebraba la segunda cita puntuable para este campeonato de Madrid, y aunque en principio había sido incluido también dentro del calendario del castellano manchego, al final no era así, pasando la próxima cita de este al trial de Robregordo.

   El domingo se presentaba despejado y caluroso, para perjuicio de pilotos, controles y público, aunque afortunadamente una ligera brisa hizo que la jornada no fuese tan "veraniega" como lo habían sido los días previos al trial. Muchos pilotos se daban cita en esta ocasión, entre ellos muchos castellano manchegos y algunos valientes debutantes.

   La localidad del sureste de Madrid, que pese a no estar en la sierra y a sus pocas posibilidades trialeras, deparaba un bonito trial, teniendo en cuenta las limitadas posibilidades del terreno. Así una vez más la gente del Motoclub Valdemanco supo sacar el máximo provecho de la orografía del lugar y nos sorprendía con un trial entretenido, con predominio de zonas sobre tierra, con grandes subidas y giros además de alguna que otra zona con piedra.

   El Paddock se situaba en una esplanada a las afueras del pueblo, por lo que el escenario era totalmente distinto al del año pasado, y también mucho mejor para la práctica del trial. Además se incrementaba el recorrido de la interzona y se aprovechaban los lugares destinados a una línea de tren que jamás se puso en marcha.

   Un total de ocho zonas, de un nivel bastante sencillo para todas las categorías, a las que dar tres pasadas en un tiempo de cuatro horas y media esperaban a los pilotos. Las dos primeras, de giros sobre una ladera de tierra y algo de roca, se encontraban junto a la carpa de salida, lo que provocó la formación de numerosas colas, especialmente en la segunda, ya que era larga y una de las más complicadas en algunas categorías. Posteriormente se tomaba un tramo de interzona que llevaba a una zona compuesta de largas y empinadas rampas de tierra, después otro tramo de camino hasta la zona 4 con más tierra y un escalón para los A. Siguiendo el camino se llegaba a las dos siguientes zonas, esta vez con piedra formando algunos escalones técnicos y un poco más adelante las dos últimas, nuevamentecon el predominio de las subidas en tierra y los giros como protagonistas.

   s dos siguientes se ponía en marcha una temporada más el pasado fin de semana en Colmenar Viejo, el sábado era el turno de las clásicas, alevines y juveniles y el domingo el del resto de categorías: A, B, C y D. 

   La jornada del domingo amanecía bastante diferente a la del sábado, con el cielo cubierto y el terreno húmedo, pero aunque no apareció el sol tampoco lo hizo la lluvia. El trial en esta ocasión fue organizado por los chicos del club Sotobike, grandes aficionados al trial, muchos de los cuales se sacrificaron sin correr para organizar o hacer de control en las zonas, un gran detalle que es de admirar. El Sotobike sustituía al Motoclub Colmenar, organizador en anteriores ocasiones de este trial, y esto se hizo notar ya que los del Sotobike son trialeros y saben ya como hacer las cosas, pese a ser un club con poco más de un año de existencia.

   La temporada no se iniciaba aquí, pues el trial madrileño ya estrenó el año con la cita de Valdemanco el pasado 8 de febrero, aunque no era puntuable para el campeonato de Madrid. Por lo tanto las novedades ya se habían experimentado, como la nueva reglamentación, que ya no es "non stop" sino que se permiten los movimientos en parado y todas esas "acrobacias" modernas salvo la marcha atrás.

Record de inscritos y muchas colas a la entrada de las zonas

   El nuevo reglamento ha provocado muchos cambios, algunos a mejor otros a peor pero en general el balance final es muy positivo. Por un lado las zonas suelen ser más difíciles, hay que trabajarlas más y en muchas ocasiones existen giros muy cerrados en los que hay que colocar la moto, lo cual hace la conducción más cansada. Esto hace que quizás sea algo más complicado el marcaje de las zonas según las categorías. Pero la gran ventaja es que las cosas fueron mucho más fáciles para los jueces de zona, el reglamento era mucho más sencillo de aplicar, y además se evitaron las antes habituales discusiones entre pilotos y jueces y el público pudo comprender mucho mejor la puntuación y la esencia de este deporte. En cuanto a lo que algunos temían, la fluidez en el paso por las zonas, tampoco hubo problemas gracias al tiempo de minuto y medio, por lo tanto el nuevo reglamento fue un éxito, aunque perjudicial para el estilo de muchos pilotos.

   La principal característica de este trial fue la elevada participación, record en la historia del Campeonato de Madrid, con nada menos que 106 inscritos el domingo. Esta circunstancia fue por un lado debida a que cada día son más los aficionados que debutan o vuelven a la competición, algunos de ellos motivados por Todotrial.com y por otro a que algunas citas del madrileño serán también puntuables para el Campeonato de Castilla La Mancha, concretamente esta de Colmenar y las de Villar del Olmo y Venturada. Por lo tanto muchos fueron los pilotos habituales del castellano manchego que se acercaron a Colmenar para disputar también la primera cita de su regional, además contando con la ventaja de que podían competir en Madrid sin necesidad de sacar la licencia nacional.

Pese a estar junto a un polígono industrial, la zona del era bonita y bastante buena para marcar un trial

   Así, la explanada situada junto al Polígono Industrial La Mina quedaba plagada de coches y pilotos dando un ambiente realmente increíble, como si de una gran cita internacional se tratase. Además numeroso público se acercaba a las zonas para ver el espectáculo. Tan alta participación provocó lo que ya se temía, colas abundantes en la entrada de las zonas, aunque la verdad es que el problema fue mucho menor del esperado. Por un lado el Motoclub Colmenar decidió eliminar una zona en las categorías C y D, que no pasarían la 3, y además estos niveles comenzaban el trial en la zona 4, mientras el resto lo hacía en la primera, por lo que se evitaron atascos mucho mayores. Por otro lado todas las zonas contaban con controles y ayudantes de pica, y la rapidez en el paso de los pilotos fue otro punto favorable para evitar mayores atascos.

   El trial constaba de 8 zonas, 7 para C y D, a las que dar 3 vueltas, con un recorrido no demasiado largo, y un tiempo de 4 horas que ya desde el principio se mostraba totalmente insuficiente para completar el recorrido. Prácticamente ningún piloto hubiese entrado sin penalizar, asíque en el tercer giro se avisó a los pilotos de que el tiempo no sería tenido en cuenta.

La Vía Pecuaria por la que hubo que pagar discurría junto a una fábrica de cementos

   No podemos dejar de comentar la ya tristemente típica dificultad para organizar un trial a causa de los absurdos problemas con medioambiente. En esta ocasión el problema surgió por el uso de una Vía Pecuaria, ya que el miércoles día 12 se informaba a la Federación de la necesidad de obtener la autorización de la Dirección General de Agricultura y el posterior pago de las tasas por utilización de unos 20 metros de Vía Pecuaria que ascendía nada menos que a 920,45 Euros. Esto perjudicó a todos, y una vez más estuvo en juego la celebración del trial, optándose finalmente por incrementar la tarifa de inscripción en 8 Euros por piloto para pagar las tasas por el uso de la Vía Pecuaria.

   De agradecer es que la FMM pusiera a disposición de los pilotos una circular informando de todo lo acontecido en la que incluso se adjuntaba fotocopia del justificante de pago a la Comunidad de Madrid, y que cada uno podía recoger en la mesa de inscripciones. Sin embargo muchos se preguntaban si no hubiese sido mejor prescindir del uso de esa vía pecuaria que simplemente se utilizaba para acceder a la zona 8, marcando ésta en otro lugar y por lo tanto ahorrándose los pilotos esa fuerte inscripción, tras la que muchos mostraron su disconformidad.

Aurelio Mayoral tenía una buena actuación en A

   Pero polémicas aparte veamos ya como transcurrió el trial. Como ya se ha comentado, el día amanecía nuboso y el terreno muy húmedo, con la hierba mojada y las piedras muy resbaladizas. Las zonas estaban marcadas en laderas, predominando el paso por rocas y las fuertes pendientes de tierra. A medida que fue transcurriendo la mañana el terreno se fue secando y eso se hizo notar, pero las zonas se mostraron muy complicadas ya que estaban marcadas para terreno seco. Esto hizo que las puntuaciones fuesen mucho más elevadas de lo habitual en todas las categorías.

  Nivel A, rojo

   Lo del nivel A, el de máxima dificultad hubiese sido impensable tan sólo hace dos años, nada menos que 22 inscritos, nunca antes la máxima categoría había tenido una participación tan alta, y hace bien poco eran habituales los triales en los que sólo 3 ó 4 pilotos competían en ella. La explicación la tenemos en el cambio que se efectuó el año pasado, las zonas pasaron a ser mucho más fáciles y menos peligrosas, ya que antes sólo eran capaces de entrar en ellas pilotos de gran nivel como Dani Cuerdo, Diego Garrido o Juan González. Con las zonas más factibles el año pasado fueron muchos los veteranos o los jóvenes que volvieron a este nivel y el resultado ha sido un gran éxito.

Dani Cuerdo fue el claro vencedor en A	Félix Vallés terminaba segundo tras Cuerdo

David Quer, el nuevo probador de Moto Verde, cada día va mejor

   En esta ocasión muchos fueron los que volvieron a decantarse por este nivel, algunos subían desde el B, como José Luís López Bueno, otros volvían tras muchos años retirados como Francisco J. Miguel Esteban, Mario San Martín o el de Guadalajara Aurelio Mayoral. También volvíamos a ver a Dani Cuerdo compitiendo en un trial del madrileño, incluso asistiendo al mismo pero como mochileros o espectadores estaban pilotos de gran nivel ya retirados como Juan Luís López de la Torre o Angel Dombriz. Y es que el trial es un deporte al que tarde o temprano se acaba volviendo.

   En esta ocasión las zonas de nivel A fueron bastante más difíciles de lo que fue habitual la pasada temporada, no tanto como antiguamente pero sí más que todos los triales disputados el 2002. Entre la humedad, el nuevo reglamento, la poca variedad del terreno, y el marcaje de las zonas, estas resultaron bastante feas y ratoneras, además de poco selectivas y técnicas. Pocos pilotos estaban contentos con el marcaje, especialmente por los pasos ratoneros de algunas zonas, en las que la mayoría se arrastraban con el varios y arañaban la moto entre las rocas por las que prácticamente la moto no cabía.

   Como era de esperar Dani Cuerdo se distanciaba claramente del resto, con unas zonas muy sencillas para un piloto del nacional Senior A como él. Cuerdo marcaba sólo tres puntos en la primera vuelta, y tras él había un triple empate a 13 puntos entre Félix Vallés, Juan González y Aurelio Mayoral. Cuerdo lograba la victoria con sólo 5 puntos, dando la última pasada a cero. Tras él, Félix Vallés y Juan González se disputaban los puestos de podio. Curiosamente ambos pilotos, y alguno más, se vieron favorecidos en alguna ocasión por los controles ahorrándose algún fiasco, bien por dejarle a uno repetir la zona tras haber calado la moto o bien al no ver en el otro como se salía de la cinta, circunstancias que no deberían darse y que molestaron a otros pilotos como es lógico. Pese a estas pequeñas excepciones no hubo discusiones con los controles y estos actuaron por lo general muy correctamente.

Chema Gómez cerraba el podio en B

   Félix Vallés, que este año corre con licencia madrileña y dentro del Motoclub Valdemanco, lograba la segunda posición con 20 puntos por delante de un cada día más recuperado Juan González con 31. Tres ellos quedaron Alfredo y Mariano Gómez, hijo y padre, este último empatado a puntos con Aurelio Mayoral pero con 7 ceros frente a los 4 del castellano manchego.

  Nivel B, azul

   El nivel B también se beneficiaba de una gran participación, pese a ser el que últimamente contaba con menos inscritos. Muchos son los que se han dado cuenta de que es un nivel ideal para disfrutar para aquellos que tienen un buen dominio de la moto y las zonas C y D les quedan demasiado fáciles y aburridas. Algunos de los veteranos más ilustres siguen dando aquí mucha guerra, como León Álvarez, Paco Guzmán (que esta vez no asistió), Manuel Jiménez, Alberto Moreno, Antonio Serrada o Bertrán Martínez. En esta ocasión se unían los pilotos castellano leoneses como Chema Gómez y Victor Valle, o algunos juveniles con ganas de aprender rápido como Roberto Bautista, Tomás Llorente o José Miguel Herrero, que ascienden desde el nivel C. Destacar también la vuelta de Félix Iñiguez, ya recuperado de la hernia de espalda que sufrió el año pasado en una caida a bordo de un tren.

León Álvarez se llevó la victoria en el nivel B	Victor Valle quedaba cuarto en B

Alberto Moreno finalizaba segundo en B

   Aquí las zonas también se mostraron excesivamente complicadas, y las elevadas puntuaciones son clara muestra de ello. Hay que dejar claro que este trial fue dificil en todos los niveles y que esto no significa que todos sean así en lo sucesivo, pues muchos fueron los que salieron desmotivados. Alberto Moreno se ponía en cabeza tas el primer giro, seguido de cerca por León Álvarez y un poco más atrasado Chema Gómez. León fue recortando posiciones a Moreno, mientras Gómez también se les acercaba. Al final León Álvarez marcaba en su tercera vuelta el mejor parcial de la categoría y resultaba el vencedor con un total de 45 puntos, cinco menos que Alberto Moreno, mientras el tercer peldaño del podio era para Chema Gómez. Tres ellos finalizaban Victor Valle, José Luís Ruíz, Bertran Martínez y Félix Íñiguez.

  Nivel C, verde

   Esta fue la categoría con más participantes, ni más ni menos que 39, por lo que fue una de las más competidas.

Nacho Tamargo era el ganador en el nivel C

   Pero esta vez, y al igual que en las demás, el nivel de las zonas fue mucho más alto de lo habitual, las puntuaciones se dispararon para lo que suele verse en este grupo en el que los primeros normalmente se juegan los puestos del podio por la mínima. La cosa fue muy distinta, y la diferencia de puntos entre los pilotos fueron bastante abultadas en comparación con lo habitual. Esto beneficiaba a algunos que podían recuperar un fiasco o una mala pasada, pero perjudicó a los de menos nivel a los que las zonas les quedaban algo grandes.

   No había demasiadas novedades en cuanto a pilotos, siendo los habituales, a los que se sumaba un buen número de castellano manchegos en lo que para ellos también era la primera cita puntuable de su regional. Algunos suben de nivel como los Franqueira padre e hijo o el piloto Todotrial Javier Peñacoba, otros vuelven tras un año en blanco como los hermanos de Paz, y otros se muestran ya en plenas facultades como el también piloto Todotrial Nacho Tamargo, recuperado de su reciente operación de rodilla. Destacar la ausencia del varias veces campeón y piloto Todotrial Tomi Tordesillas. Otra nota curiosa a destacar fue la reaparición tras casi 20 años retirado de Alfonso Sánchez Eguibar, a muchos no os sonará este nombre pero fue uno de los mejores trialeros madrileños en los años 70 y 80.

Luís Arocas era segundo en C	El de Todotrial Carlos Varadé se quedaba a un paso del podio

El pequeño Arturito Alonso era quinto en su primer trial en C

   Precisamente entre varios "scottishman" se disputaban los puestos de podio: Luís Arocas y los de Todotrial Nacho Tamargo y Carlos Varadé, a quienes se unía también Ignacio Fernández Sancho. En el primer giro era el campeón de la categoría, Luís Arocas, quien se colocaba líder con 9 puntos, seguido de Nacho Fernández Sancho, Luís León Bustamante y Nacho Tamargo. Este último y el pequeño Arturo Alonso marcaban los mejores parciales hasta el momento con 8 puntos, y en el tercer giro el de Todotrial remataba la faena con un parcial de sólo 7 puntos que le daban su primera vistoria en esta categoría. A tres puntos de Nacho Tamargo se situaba Luís Arocas, mientras Fernández Sancho cerraba el podio por delante de Carlos Varadé, Arturito Alonso y Luís León Bustamante. Este año la categoría parece presentarse más abierta y disputada que nunca.

  Nivel D, amarillo

Javier Soto era tercero en D

   El nivel D, sigue siendo el más sencillo, el ideal para iniciarse en este deporte, mantenerse los más veteranos o disfrutar aquellos que no tienen un nivel tan elevado como exigen las demás categorías. También muchos inscritos, 29, entre ellos muchos pilotos de Guadalajara o de otras zonas de Castilla la Mancha. Aquí sucedió lo mismo que en el resto de ategorías, las zonas fueron mucho más complicadas de lo habitual y esto se reflejó en tarjetas de penalización cargadas de puntos, y en algunas ocasiones con muchos fiascos y varios. En un trial tan difícil como este muchos fueron los que se desanimaron y otros los que incluso prefirieron retirarse. Sin embargo los pilotos punteros se encontraron cómodos, pues no había tanta presión y algunos errores podían recuperarse.

   En el primer giro Javier Soto y su Scorpa eran los que daban la sorpresa situándose en la primera posición con 5 puntos, pisándole los talones estaban Fidel Holguín, Paco Gónzález, Juan Pérez Cabrera, Vicente Domínguez y Arturo Alonso "senior". Pero sería Fidel quien marcaba las diferencias en los dos giros siguientes, con parciales de 6 y 3 puntos, siendo este el mejor de la categoría.

Vicente Dominguez "Molinés" era 6º en D y 1º en el Castellano Manchego	El trial de Colmenar fue dificil, aquí Luís Picazo en apuros

   De este modo Fidel Holguín se hacía con el triunfo al sumar 15 puntos, mientras las cosas estaban mucho más apretadas en las siguientes posiciones. El jefe de taller de Difrenos Paco González subía al segundo puesto del podio con 21 puntos, y a uno sólo de diferencia terminaba Javier Soto en tercera plaza.

   El campeón y subcampeón de la pasada temporada, Alejandro Recio Y Juan Pérez Cabrera quedaban esta vez fuera del podio, en cuarto y quinto puesto respectivamente, seguidos de Vicente Dominguez y Alejandro Arnáez.

   En definitiva, intenso inicio de temporada con record de inscripciones que hacen prever un año muy interesante y disputado, especialmente en aquellos triales que sean puntuables tanto para el Campeonato de Madrid como para el de Castilla la Mancha, al igual que este de Colmenar Viejo. La temporada se ha hecho esperar y no hemos podido disfrutar de triales invernales pero seguro que los próximos compensarán la espera. La siguiente cita también se hará esperar, será el 11 de mayo en Zarzalejo.

   Tienes fotos de casi todos los participantes en el apartado Racing de www.difrenos.com